Explicación del Mundo Espiritual 1949 Feb. 2

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Explicación del Mundo Espiritual de Luz. Miércoles 2 de Febrero de 1949 Tema: ¡Cumplimiento de Cargos antes del año 1950!

En el Nombre de Cristo el Divino Maestro, yo saludo a mis queridos hermanos, para servir a su Divinidad; y también, para servir a vosotros. Humilde Ser Espiritual.

1. Nuevamente, hermanos míos, os congregáis en día de Gracia para recibir el Mensaje del Mundo Espiritual.

2. Vosotros habéis experimentado en estas Benditas reuniones, una gran Paz Espiritual; se ha Regocijado muchas veces vuestro espíritu, al recibir la Aclaración, la Explicación de muchas Lecciones y manifestaciones espirituales, en las cuales no habíais alcanzado a profundizaros; y siempre habéis marchado a vuestro hogar, llevando un presente de Espiritualidad, un Mensaje de Luz, una Voz de Alerta y una Explicación más.

3. Cuando habéis asistido a las Cátedras del Divino Maestro, habéis sentido que ya Comprendéis mejor; que palabras, acciones o cosas de las cuales Él os hablaba y que no habíais alcanzado a Comprender bien; ahora es fácil para vuestro espíritu Comprenderlas, por la Ayuda que habéis recibido de vuestros hermanos espirituales.

4. ¡Benditos seáis, queridos hermanos!… porque el Amor del Mundo Espiritual, el Ahínco de estos Seres, ha encontrado eco en vuestro corazón. Que vuestra Presencia, el aprovechamiento de estas Explicaciones de la Enseñanza, vuestra asistencia y ahínco, hermanos míos, sirva también de Estímulo a estos Labriegos: los unos guías, los otros Pedestales, los otros Facultades… pero todos: Labriegos en la Campiña del Señor…

5. Para que, no desfallezcan en el Camino, para que esta Fortaleza, esta Fe, este Ímpetu con que se han lanzado a la lucha en estos últimos años, no decaiga; antes Bien, que este Ahínco aumente en su corazón y que sirva de Ejemplo y de Estímulo a todos los demás, para que todo el Pueblo de Israel, se levante en estos años de Cumplimiento, a Preparar la Ofrenda, la Cosecha, el Tributo para el Padre.

6. Para el Dios único Infinito en Amor, en Caridad y en Complacencia para sus hijos, que no se ha detenido en este Tiempo, a contemplar el pecado de los hombres, para Comunicarse por su mismo conducto.

7. Para el Dios Omnipotente y Bondadoso que, desde 1884 hasta 1950, está Transmitiendo su Divina Palabra, las Lecciones de su Enseñanza, sus Revelaciones, a través de los seres humanos Escogidos por su Voluntad; y llamados por Él: Portavoces, Pedestales o Ruiseñores. …

8. Ante Él, tendrá que llegar el nuevo Pueblo de Israel, a entregar el resultado de su Labor en este tiempo. Ante ese Maestro tendrán que llegar todos los Discípulos y párvulos, a contestar las preguntas que el Maestro, les haga a los Discípulos, al entregar la última Lección; y para que vosotros podáis, con toda Preparación Espiritual, con toda Tranquilidad de Conciencia, llegar ante esa Planta Divina, en esa alba de Gracia; el Mundo Espiritual, pone todo su Ahínco, todo su Amor, para Ayudaros a vosotros.

9. Y así, como el Mundo Espiritual os ayuda a unos, queremos que todos os Ayudéis los unos a los otros, para que esta voz sea transmitida, para que esta Palabra de Alerta, hermanos míos, Despierte a todos por igual; porque los días transcurren y la hora de Juicio se acerca y el Pueblo no ha Despertado; y si no ha Despertado el Pueblo a la Verdad y a la Luz, ¿Qué puede esperarse?… ¿Qué será lo que vaya a entregarle aquel Padre?… ¿Cómo escucharemos en el Valle Espiritual la Voz de Justicia derramada sobre este Pueblo que nos fue confiado también a vosotros sobre esta hermandad que fue Conducida y Aconsejada por nosotros, los Protectores Espirituales?…

10. No queremos, hermanos, que este Juicio, sea sobre vosotros y sobre nosotros también; queremos el Mundo Espiritual, que la Gracia del Padre, su Amor y sus Divinas Complacencias Espirituales, en ese instante se derramen como un Premio, como un Galardón, por el Cumplimiento, por la Obediencia, por la Espiritualidad del Pueblo Escogido de Dios.

11. No queremos los Seres Espirituales, que la división que hoy reina y que ha sido siempre entre vosotros, esté presente en vuestro corazón en aquel momento; queremos que esta división, con anterioridad desaparezca; y ese lugar, lo ocupe la Armonía, la Fraternidad y el Amor.

12. Que el tiempo que el nuevo Pueblo de Israel malgasta en juicios, en intrigas, en divisiones, lo Aproveche en Meditar y Analizar la Palabra del Maestro, en profundizarse en la Doctrina Divina, en Perdonarse de los unos a los otros, en acercarse más, en llegar a la Comprensión, en destruir todos los errores y convertirlos en Pasos de Perfeccionamiento.

13. Se acerca el año 1950. El año 1950 no es un minuto, no es instante, es un año; y ese año, va a Confiarlo el Padre a su Pueblo, como un año de Amor, de Perdón, de Reconciliación y de Restauración también hermanos míos; un año, en el cual, Israel debe Unirse, debe levantarse a dar un Buen Ejemplo a los demás.

14. El Divino Maestro se encuentra tocando y Preparando grandes cabezas y espíritus entre la humanidad, dentro y fuera de vuestra propia nación; con el fin, de que estos espíritus encarnados, sean Testigos de que Dios se Comunicó por el entendimiento del hombre y de que ellos, así lo vieron.

15. No se irá el Maestro, habiéndole solamente vosotros escuchando, habiendo sido solamente vosotros los únicos Testigos de que Estuvo y Partió; será como en el Segundo Tiempo, que, en los últimos instantes de su Predicación, de su Misión entre los hombres, fue Contemplado y Atestiguado por muchos; no solamente los judíos, lo escucharon en los últimos días.

16. No solamente sus Doce apóstoles, recibieron sus últimas Palabras, ¡no!… las grandes porciones del Pueblo de Israel, las multitudes de romanos, los súbditos del césar, los príncipes de la iglesia, los publicanos, los fariseos, los hombres de ciencias, los gentiles, todos ellos fueron Testigos, porque Jesús, dejó las campiñas, dejó los valles, dejó las aldeas y las riberas de los ríos y la mar, para penetrar en la gran ciudad que había de ser Testigo de su Amor, de su pasión, de su muerte; para que aquellas muchedumbres que celebrando fiesta podían encontrarse, –fiestas tradicionales– todas ellas escucharan aquella Voz, contemplaran aquel hombre y recibieran de Él, todo lo que Él era: Vida y Amor, Palabra y Esencia. …——————————————————————————————————-

17. Así también, hermanos, en este Tiempo, será el último año, -el año 1950- Cuando ya hayan desaparecido de entre vosotros, todas vuestras diferencias, todas vuestras incomprensiones, todas vuestras malas miradas; cuando vuestro corazón se haya Limpiado y os comencéis a Amar de Verdad, cuando el cisma y la división tradicional en el Pueblo de Israel, hayan desaparecido; entonces, penetrarán entre vosotros esos grandes espíritus, esas grandes cabezas, varones y mujeres de diferentes razas, príncipes de las actuales religiones, hombres de ciencia, hombres de gran ilustración y de renombre, vendrán a ser Testigos de las últimas Cátedras del Maestro; vendrán a recibir su Esencia de Vida Eterna a través de los entendimientos por la Palabra; vendrán a ser Testigos ante la humanidad, ante el mundo, de que Dios se Comunicó en este Tiempo a través del hombre en palabra humana, por medio de su Rayo Universal.

18. Pero, es necesario que en ese año se presente al mundo, se presente al hombre, la Verdadera Obra del Padre; que los Pedestales transmitan con Perfección y Pureza la Palabra de Dios; que los Guías sean un Ejemplo exterior e interior ante las grandes multitudes; que una Educación Espiritual Real y Verdadera exista entre la congregación de Espiritualistas Trinitarios Marianos.

19. Que la Moral, la Sinceridad, la Verdad, el Amor y todas las Virtudes que el Padre ha depositado en vosotros, se manifiesten en vuestro propio Pueblo, en vuestro hogar, en vuestros caminos; y, entonces, hermanos míos, a no dudarlo, los hombres Reconocerán a través de vosotros, a Dios,

20. Los hombres, sentirán la Presencia del Padre en vuestra Palabra, en vuestra Vida, en vuestros Ejemplos, en vuestros Conceptos Elevados; y ellos, entonces, serán los grandes Testigos, ellos serán los Heraldos por los caminos entre la humanidad, ellos serán los que lleven la Buena Nueva también –Ayudando a vosotros– a las naciones, a los grandes pueblos de esta Tierra. Ayudándoos a traducir la Palabra del Padre, en diferentes idiomas, aun cuando la Palabra del Padre en su Esencia es conocida por todos los espíritus, porque solamente existe un Idioma Espiritual de Luz que es el del Amor; pero la Palabra materializada y escrita, será traducida por los hombres, a las distintas lenguas; para que así, al llegar el año 1950 a su final, la Buena nueva haya llegado a muchos hombres, los Testigos se hayan levantado como Precursores de vosotros por los pueblos y naciones; y el Padre, entonces, cuando dirija a su Pueblo su última Palabra a través del entendimiento humano, pueda encontrarse rodeado en Cumplimiento a su Palabra, de su Pueblo Escogido y de todos los Testigos llamados por su Divinidad.——————————————————————————————————

21. Trabajad, entonces, queridos hermanos, por destruir todas las imperfecciones, todos los errores que se hayan cometido y practicado dentro del Culto y de la Doctrina del Padre, para que la humanidad encuentre Limpia la Obra, para que no le atribuya imperfecciones que no tiene, para que no juzgue que vosotros los Discípulos, los Primeros, no le habéis comprendido, ni habéis sabido interpretar su Palabra; para que los hombres no juzguen imperfecta esta Doctrina, vuestra Espiritualidad; que vuestro Culto, esté lleno de Pureza y reconozcan que ese culto y esa Espiritualidad, solamente el Espíritu del Padre podría haberlo revelado a vosotros.

22. Es mucho lo que tenéis que trabajar, es mucho lo que tenéis que Laborar en la Obra del Padre, es mucho lo que tenéis que hablar a los demás corazones que forman la congregación del Pueblo de Israel, para que al fin pueda llevarse a cabo la Depuración que el Padre os está pidiendo.

23. Durante mucho tiempo, como vosotros sabéis, como lo hemos dicho ya en ocasiones pasadas, el Pueblo permaneció escuchando la Voz del Padre en un profundo letargo; concretándose solamente a escuchar la Cátedra, a recrearse con ella y después dejar que se olvidara, dejar que se volatilizara de la memoria y del corazón; y en las cátedras de principio de cada año y en aquellas Conmemoraciones del 15 de Agosto, el Reclamo del Padre venía siempre grande, Justo, Terminante entre su Pueblo de Israel.

24. Y el Pueblo, Despertaba solamente por instantes, ante aquella Voz, mientras el eco de la voz del portavoz resonaba en el corazón y en sus oídos; y en esos instantes, Israel, se formaba el Propósito de Enmienda, hacía en sí mismo Propósito de levantarse a la lucha; pero una vez pasado el Reclamo, volvía el Pueblo, a su letargo; y ¡ay! de aquellos que se levantaban con Buena voluntad y con temor, porque al instante su paso y su Ahínco, eran acallados por los demás; y el Cargo, la rutina y la monotonía se iban haciendo como una costumbre, como una ley.

25. Así el Pueblo, dejó que el Tiempo transcurriese hasta la llegada del primero de los Tres últimos años de la Estancia del Maestro de maestros entre vosotros; y todavía, habiendo hablado claramente en vuestro propio idioma, habiendo entregado su Palabra con la Misma Claridad que tiene la luz del astro rey, con la palabra muy Humilde y Comprensible entre vosotros, no ha sido todavía ni Obediente, ni creído ni comprendido.

26. Si ese gran tiempo de letargo, de estancamiento, no hubiese sido entre el Pueblo, si hubiese sido, aunque sea con lentitud, desde los primeros años hubieseis venido Evolucionando; retirando de entre vosotros, lentamente y paso a paso, todo lo superfluo queridos hermanos, para estos últimos años, estaríais a un paso de la Espiritualidad, a un paso de ser los Verdaderos Discípulos del Espiritualismo.

27. Entonces, cualquier paso que el Maestro, hubiese pedido, no os hubiere parecido doloroso ni prematuro, ni absurdo; pero ahora que el Padre Justamente ha pedido que lleguéis con la debida Espiritualidad al instante de su Partida, que lleguéis con el Adelanto Justo, porque mucho tiempo os ha hablado; vosotros, abrís vuestros ojos y miráis que no podéis dar esos pasos; y unos cuantos, alcanzan a Comprender esto; y muy pocos, son los que están dispuestos; y muy pocos, los que han tenido el Valor, la Entereza y la Obediencia Espiritual para dar los pasos que el Divino Maestro está pidiendo; mientras que los demás, juzgan que es una Orden absurda, que es un paso que el Pueblo, no debe dar todavía; que son pasos de prueba, que solamente se darán cuando Israel, haya Evolucionado mucho. Todo falso, hermanos.

28. El Padre ha venido con la hoz de su Palabra, a segar el trigo y la cizaña; y la cizaña que es todo el fanatismo, que es todo lo superfluo, que es todo el materialismo, desaparecerá; y el Trigo, que es el átomo de Espiritualidad y Amor que hay en el Pueblo de Israel, el Padre lo Conservará, lo dejará y lo aprovechará para llevar a su Pueblo, paso a paso al Cumplimiento y a la Perfección.

29. Queridos hermanos: El hecho de que la Divinidad en este Tercer Tiempo se haya venido a Comunicar a través del hombre en palabra humana, es para Dios un hecho Natural; pero para el hombre, es extraordinario, grandísimo y Sublime.

30. La Presencia de su Rayo Divino, la Presencia de su Verbo a través del hombre, bastaba en este Tiempo, para atraer a los espíritus y a los corazones de todo el mundo.

31. Ya solamente la Presencia de su Verbo en palabra humana era suficiente para conmover a los corazones más duros, para estremecer a los espíritus más distantes de la Luz; pero este Pueblo, no lo Comprendió así, y juzgando que la Presencia de la Palabra del Maestro, no tiene el Poder, ni el Atractivo suficiente para acercar a las multitudes; entonces levantó altares y encendió lámparas, erigió imágenes, creó ritos y ceremonias, hermanos míos; y ya con estas formas, el Pueblo invitó a los hombres, hizo el Llamado a los espíritus y a los corazones.

32. Y, ¿acaso el Padre ha invitado en este Tercer Tiempo, a la humanidad, a penetrar en una religión, en una religión organizada en la forma en que lo hacen los hombres?…

33. ¡No, hermanos míos!… el Maestro no trajo altares materiales, ni vino su Mano Divina a encender lámparas o antorchas con fuego material, ni vino a pedir de los hombres ofrendas florales, ni los tributos en forma de monedas, ni el pago de sus Prodigios y Beneficios en forma material; vino solamente en Espíritu, en Verbo, en Rayo de Luz, simplemente así, a Manifestar una vez más entre los hombres, su Doctrina, su Ley que es su Obra Divina.

34. ¿Qué no juzgáis hermanos, la Presencia del Padre en este Tiempo en vuestros Recintos con la Fuerza suficiente por sí sola para conmover a un mundo?… ¿Qué es necesario ocultar esta Luz, adornar la Presencia del Padre con prácticas y cosas materiales, siendo Él la Belleza de las bellezas, siendo Él música Divina, siendo Él Concierto Espiritual, siendo Él Armonía y Perfección, siendo Él el Dueño de todos los Atributos, de todas las Perfecciones que pueden Manifestarse, aun cuando fuese en forma limitada, a través del entendimiento del hombre?…

35. ¡Qué poco Valor se le da a la Presencia del Padre y qué poco se ha estimado la Obra del Señor!… ¡Qué poco Valor se le da a su Esencia y a su Espíritu!… Ha tenido Israel, que recurrir al fanatismo y a la idolatría y servirse de esas prácticas y cosas, para atraer a los hombres; ha tenido que servirse del Bálsamo Divino y de la Fuente Espiritual de Dios y del Mundo Espiritual, materializándolo, contaminándolo con la ciencia egoísta de los hombres, para atraer a los enfermos, a los dolientes.

36. No ha tenido, Israel, la Fe y el Valor en sí mismo, en sus propios Dones, la Fe en la Presencia del Padre y del Mundo Espiritual para llamar a los hombres enfermos del cuerpo y del espíritu, a sanarse con la Esencia de la Palabra y en las Emanaciones del Mundo Espiritual; ha tenido el Pueblo, que materializarse, para poderle presentar un Testimonio palpable, visible y tangible a la humanidad.

37. El Padre, os lo ha permitido en su Amor Divino; en su Paciencia, os ha colmado de Complacencias; pero por sobre de todas esas Complacencias, por sobre de todos los errores, incomprensiones y faltas de Fe y desobediencia del Pueblo; ninguno podrá negar que la Palabra del Padre, se ha derramado siempre en Justicia, en Reclamo, en Enseñanza, en Revelaciones, en Correcciones también.

38. Cuántas veces cuando el Maestro, ha llegado a Corregir con su Amor, a Reclamar con su Justicia Divina porque tiene derecho puesto que su Obra es Perfecta y Limpia, se ha levantado también el Pueblo, para intentar corregir la Voz del Juez; y ha cerrado sus oídos y su Conciencia, para no recibir sus Divinos Reclamos; y ¡ay! de aquellos Pedestales por donde Dios ha hablado en esta forma, porque sus corazones han tenido que sangrar; y ¡ay! de la Facultad cuando el Mundo Espiritual se ha atrevido a Corregir al Guía, al Pueblo o a algún Labriego, porque ese Ser espiritual ha quedado desgarrado y el corazón del Protegido, también.

39. El Pueblo debe Reconocer que el Maestro nunca castiga a sus Discípulos; que nunca les condena, pero que sí les Corrige y sí les reclama, porque es Dios, es Juez, es Maestro y es Padre; y que sobre todo en estos últimos años, sus Correcciones tenían que ser más rigurosas, su Reclamo tenía que ser más Estricto, más Justiciero.

40. Y así lo fue, hermanos míos, también en aquel Segundo Tiempo, cuánto Acariciaba con su Corazón, con sus Palabras, con sus Miradas y aun con sus Manos, el Maestro a sus Discípulos y a las multitudes; pero también cuán inexorable era en sus Reclamos, cuán Estricto y Terminante en sus Correcciones y ante la falta de alguno de sus Discípulos, se manifestaba la Palabra del Maestro con aparente dureza, pero llena de Amor en el fondo, para Corregir la imperfección del Discípulo que tenía que conocer sus errores, que tenía que conocer sus flaquezas, que tenía que conocerse a sí mismo y conocer a su Maestro, a su Padre. ¿Para qué?… para poder después Practicar con la Palabra y con los hechos, para saber Juzgar a los demás conociéndose a sí mismo, para saber Corregirse; y también, hermanos, para alcanzar el Derecho de Corregir los defectos y las imperfecciones de los demás.

41. Y en estos Tres últimos años, el Divino Maestro ha aumentado sus Reclamos entre vosotros, ha hecho su Palabra más Terminante, con frecuencia repite aquella frase Divina, que sus Complacencias han terminado; no las Complacencias Espirituales, sino las Complacencias materiales, y Él con Amor, con palabra Perfecta en su Fondo y en su Sentido, ha venido a Corregir los más grandes yerros de su Pueblo de Israel; ha venido a descubrir el fondo del corazón, del espíritu, de la Conciencia de cada quien ante su propia vista, ha venido con su Palabra, a entresacar de lo más recóndito: los defectos las flaquezas, las vanidades, las faltas… todo aquello, que escondido en lo más profundo de cada corazón, puede encontrarse.

42. Ha venido el Maestro a señalar con su Palabra, con el Índice de su Justicia, aquellas lacras de que adolece el nuevo Pueblo de Israel y que son: su distanciamiento, la división que existe entre su Pueblo, su falta de Amor y de Caridad… su ignorancia, teniendo la Luz del Padre tan cerca; su fanatismo y su idolatría, ostentando el Nombre de Espiritualista; su metalización y su lucro, siendo que este Pueblo debe ser el desinteresado, el que no busque el pago ni el salario en esta Tierra, el que no venda el Amor, ni la Verdad, el que no cambie a su espíritu por el vil metal, el que no lleve otra mira en su espíritu y corazón, que la de Redimir a los hombres, la mira de Esclarecer la Verdad, la de hacer Luz en todos los hogares y en todos los espíritus.

43. Éstas son las grandes lacras que ha venido a señalar el Maestro, pero lo ha hecho con Amor, no ha delatado a alguien, no ha pronunciado el nombre de alguno, porque desde los primeros hasta los últimos adolecen de imperfecciones, de unas los unos y de otras los otros.

44. Él seguirá Corrigiendo y donde el Pedestal se Prepare con Espiritualidad, con Conciencia, con Amor, ahí el Maestro se Manifestará y se derramará a través de él; y, Benditos sean aquellos Portavoces que con todo Valor y Verdad se Preparen, sin llevar en su corazón, ni el temor a los hombres, pero tampoco la tendencia de que el Padre los juzgue; sino una Conciencia Limpia, un espíritu que se entregue de lleno al Padre, para que el Maestro hable lo que en sus Altos Juicios tenga a Bien decir.

45. Y Benditos también de Dios, todos aquellos Guías que se sometan a la Corrección Divina, que se sometan a las Órdenes y Mandatos del Padre, que conducen a este Pueblo y al mundo, a los pasos de Perfección; no al abismo, ni al fanatismo, no a las tinieblas, sino que el Padre viene a entregar a su Pueblo, pero Pulimentándolo, Corrigiéndolo y Perfeccionándolo.

46. Benditos esos Guías que se levanten así, porque ellos podrán inspirar a sus multitudes, podrán inspirar a sus Pedestales; ellos podrían también, con palabra Buena y Justa, Corregir a los que el Padre les ha confiado; ellos podrán también, con palabra Justa y adecuada, ir apartando del corazón de sus multitudes todas las imperfecciones y todos los errores.

47. Pero aquellos que se opongan a ese Ideal Divino, aquellos que se opongan a las Correcciones del Maestro de maestros, aquellos que se juzguen en sí mismos, como perfectos en todos sus actos; aquellos que estiman que lo que han hecho sus obras son la Obra del Padre, hermanos míos, son dignos de Caridad, porque nadie puede en estos momentos entre el Pueblo de Israel, juzgarse y considerarse Justo ni Perfecto; porque nadie puede decir que ha manifestado la Obra en su Perfección.

48. Ni el Guía ha presentado la Obra del Padre en toda su Pureza y plenitud, ni el Pedestal ha transmitido la Palabra del Padre en toda su Grandeza y Perfección, ni la Facultad ha dejado por su conducto manifestar con toda su Luz y Verdad al Mundo Espiritual.

49. Entonces, ¿por qué impedir que el Divino Maestro, en estos últimos instantes, Corrija a su Pueblo?… ¿Por qué impedir que el Espíritu Santo, entregue su Palabra que ha de ser Senda para la humanidad, que ha de ser Barquilla y Puerto de Salvación para este mundo que naufraga entre tinieblas?…

50. ¡Ah!… qué quisiéramos hermanos, que la Voz del Mundo Espiritual que de este humilde Recinto resuena y se Manifiesta Libremente, -Libre de toda tendencia, Libre de toda imposición- que así pudiese ser escuchada por todos: con la Humildad, con la Mansedumbre, con el Acatamiento que todos demostráis en este instante… porque nadie viene a decir al Padre y al Mundo Espiritual: –Nada tenemos que Aprender… ni venís a decir: –No tenemos defectos, nosotros somos primeros… sino que venís como Discípulos y como párvulos, Humildemente, a presentar desnudo vuestro corazón para que el Padre lo Corrija y el Mundo Espiritual lo Aconseje.

51. Esto es lo que este Pueblo debe hacer en estos últimos años, para que el Padre con su Amor y con su Luz, Limpie e Ilumine el corazón de Israel; para que sobre el espíritu de este Pueblo, caiga, no la sangre del Segundo Tiempo, sino la Luz del Espíritu Santo, para que lo Bañe, que lo Unja, que lo Eleve; para que este Pueblo, quede Dignamente Preparado para presentarse ante la humanidad sin avergonzarse de sí mismo; habiendo Conquistado el Derecho de Corregir y de Enseñar a los demás, porque esta lucha interna de ahora, hermanos, después será externa.

52. Ya después este Pueblo, no buscará el Calor de la Palabra del Padre en los humildes Recintos; ya el Pueblo, no se ocultaría de las miradas de los hombres para buscar este rincón en el cual, oír la Voz del Padre y del Mundo Espiritual; será entonces cuando el Pueblo, Unido en espíritu y fuerte por su Unificación, se levante lleno de Obediencia, de Armonía, de Espiritualidad, en pos de las demás religiones a llevar la semilla de la Verdad, a llevar la Luz, la Explicación, el Esclarecimiento de las Revelaciones, a Predicar la Palabra del Padre, la Doctrina del Espíritu Santo, a ser el Ejemplo con los hechos de Espiritualidad; pero si entre vosotros, no existiese Unificación, ¿Cómo podríais vosotros, contener la desunión del mundo?…

53. Si después de que el Maestro, os haya dejado en su lugar, adolecéis de fanatismo o de idolatría, ¿con qué derecho podréis penetrar en las demás religiones y señalar esos defectos de idolatría y fanatismo a los demás?… ¿Si las manos de Israel, se hubiesen manchado con el metal, si el corazón del Pueblo, albergase el interés mezquino por las monedas, cómo podría este Pueblo corregir ese defecto del cual adolecen todas las religiones?… ¡No tendría ese Derecho este Pueblo!…

54. Sin embargo, si él se Limpia, no solamente de sus labios, sino de su corazón y de su espíritu, este Pueblo que sois vosotros, hermanos míos, daréis el Verdadero Ejemplo; Conmoveréis a los hombres y haréis estremecer en sus cimientos, a las poderosas religiones. Seréis entonces Reconocidos, como: Los Discípulos del Espíritu Santo. …

55. Entonces, el mundo no confundirá el Nombre de Espiritualismo, con el de Espiritismo; entonces el mundo sabrá que sois Espiritualistas por la Luz, por la Unción y la Gracia del Espíritu Santo, porque sois el Pueblo que ha recibido del Espíritu Santo, en este Tercer Tiempo, la Revelación, la Orden y el Cargo.

56. Entonces, el mundo Reconocerá que en vosotros está la Bendición y la Paz, aquella Bendición que Dios prometió a Jacob desde el Primer Tiempo sobre su Pueblo, sobre su familia.

57. Y por doquiera que vosotros vayáis, hermanos, con vuestra Espiritualidad, con vuestro Amor y con vuestra Elevación iréis llevando la Luz, la solución de los conflictos, la Unión de los desunidos, la Salud para los enfermos; en una palabra: vuestro trayecto por el mundo, será de Bendición para la humanidad… y mientras los unos os desconozcan, los otros se levantarán dando Testimonio de que han recibido de vosotros: el Bien, la Paz y los Prodigios. …

58. Pero ya veis, hermanos, que para alcanzar todo esto, ese Grado de Espiritualidad habrá mucho que sufrir, mucho que luchar y que trabajar.

59. En estos cortos instantes, aún tendrá el Divino Maestro que derramarse mucho en palabra, el Mundo Espiritual también tendrá que pugnar a través de las Facultades; los Guías, que se levanten, tendrán también que sufrir, que trabajar; los Emisarios tendrán que luchar Afanosamente aun con sufrimientos; y todo aquel Marcado y no Marcado que se levante con Obediencia, con Anhelo, con el ideal, tendrán también que sufrir y que luchar; pero vendrá el Triunfo después entre todos; ese Triunfo, que ya deberíais tener en el seno de vosotros mismos.

60. ¿Cuál triunfo?… el de vuestra Unificación Espiritual, el de vuestra Depuración, el de vuestra Regeneración. Todo eso, ya debería existir en vuestro seno; y ya deberíais estar solamente concretando vuestro espíritu a recibir las últimas Lecciones de la Enseñanza del Maestro, a Preparar todo para su Partida, a Preparar a las congregaciones de su Pueblo, a las muchedumbres, para que ellas no resientan, no sufran con la ausencia de su Palabra.

61. Pero han llegado, los últimos instantes; y el Pueblo, está ocupado en discutir, en juzgar si deben permanecer los objetos que Representan los Símbolos o si deben retirarse, si deben rezar u orar y si se deben cantar en los Recintos. Todavía se está discutiendo todo esto, cuando debiera ya existir un Criterio Unánime, Un solo Conocimiento, Una sola Práctica, Un solo Culto.

62. Todos vosotros, hermanos, que hoy sois todavía en corto número, que tendrá que ir aumentando, porque al finalizar este año, estas reuniones serán más grandes; y el Padre, nos concederá a los Seres Espirituales, mayores inspiraciones y Mensajes para vosotros; y muchos que hoy no tienen Esperanzas de dar pasos de Perfección, los darán; y gran Regocijo habrá en vuestros corazones, por el Despertar del Pueblo de Israel; pero vosotros que estáis escuchando estas Lecciones de la Enseñanza, estas Explicaciones y Mensajes que muchos otros no reciben; Preparaos también, para que los que seáis Guías, lleguéis al último año, al año 1950, con una gran Preparación; para que así el Maestro, haga el Llamado a esos grandes espíritus y corazones al seno de vuestros Recintos, a escuchar ahí la Voz del Maestro y conocer ahí la Obra del Padre.

63. Que ellos, al contemplar que vosotros sois Guías del Pueblo de Israel en el Tercer Tiempo, contemplen en vosotros la Espiritualidad, la Energía, el Celo, el Amor; que contemplen en vosotros, -si os escudriñan, si llegan aún a penetrar en vuestra vida privada- una Vida: Virtuosa, Sencilla y Moral… en lo humano. Una Vida: Honesta. Honrada y Recta… y en lo Espiritual: Una Práctica y un Culto Elevado. …

64. Que contemplen, que vosotros sabéis tratar a vuestras multitudes con Amor siempre; con energía, cuando es necesario, pero sin confundir jamás la energía con la crueldad o con la injusticia; una energía Bien entendida, para encauzar a las multitudes por el Buen Sendero del Maestro de maestros.

65. Que los hombres contemplen en vosotros, un Respeto infinito a la Divinidad; que solamente habléis a Dios, cuando Él se está Comunicando a través del Pedestal o Portavoz, cuando sea muy indispensable; cuando no sea indispensable, no habléis, no hagáis peticiones de Bálsamo, de llaves del trabajo.

66. Dejad que el Maestro también entregue a aquel que de espíritu a Espíritu le pide, cuando él lo saluda. Cuando vosotros como Guías queráis comunicaros con el Maestro, hacedlo de espíritu a Espíritu, como un Ejemplo para la multitud; y solamente en los casos de Marcas o de Consagraciones, en pasos Verdaderamente indispensables, dirigidle la Palabra al Divino Maestro a través del Pedestal.

67. De este modo, daréis un Ejemplo de Respeto, de Amor y de Elevación de espíritu; porque vosotros sabéis que en muchos Recintos se falta al Respeto a la Divinidad; y es grande, muy grande la profanación; pues no solamente los Guías le dirigen la palabra, los Pedestales, los Videntes muchas veces materializando el instante, materializando la Manifestación; sino también, los necesitados entre el Pueblo, haciendo peticiones verbales; o sea, con sus propios labios, dando un ejemplo, hermanos míos, de nula Espiritualidad, de nulo Respeto; un ejemplo, muy malo para las nuevas multitudes, para los nuevos Discípulos que van llegando ante el Maestro.

68. Es fácil, muy fácil Educar a las multitudes; las muchedumbres son Obedientes, hermanos míos; podéis hacer de ellas, cuanto queráis, podéis inculcarles cuanto queráis; son Dóciles, son Dúctiles, pero vosotros tened una Alta y gran Preparación, para que a ellas les Enseñéis lo Mejor; para que uséis siempre la mejor Táctica, para llevar a las multitudes por la senda del Progreso y no se estacionen.

69. Y entonces, hermanos, cuando lleguen en el año 1950, todos esos Llamados por el Padre, ellos contemplarán una gran Manifestación, un silencio, un Recogimiento absoluto en la multitud, una efectiva Elevación, una Concentración Espiritual, una Verdadera Comunicación con la Divinidad. Y por esa Concentración y por esa Elevación, lograréis que el Espíritu Divino trasmita mayores Revelaciones, mayor Esencia a través de los Pedestales; y esto, asombrará a los incrédulos y Regocijará y Alimentará a los creyentes y a los Discípulos del Espíritu Santo.

70. Que los Pedestales que asistan a estas humildes reuniones con el Mundo Espiritual, también se Preparen más y más y Reconozcan que tienen que hacer un pequeño sacrificio, un pequeño esfuerzo, más de lo que han hecho en su camino, para servir a nuestro Padre Dios; y tendrán, en estos últimos años, que consagrarse, que entregarse aún más al Padre.

71. Este esfuerzo, no quedará sin Galardón, este sacrificio no quedará sin Premio. El Premio, será el Adelanto de ellos mismos; el que el Espíritu Santo, se Manifieste con mayor Claridad a través del Portavoz.

72. ¡Qué mayor Gloria para esos corazones Agraciados con el Don de Portavoz, de que el Padre pueda derramarse en plenitud sobre su Pueblo, en estos últimos años, de que el Padre pueda Corregir y Limpiar a su Pueblo, hasta dejarlo como el ampo de la nieve?… ¡Qué mayor premio para esos Portavoces, después del año 1950, por haber Cumplido bien!…

73. Vosotros, Portavoces, no seréis después del año 1950, Glorificados en la Tierra, ni seréis escudriñados por las multitudes, ni os considerarán los seres humanos como algo sagrado. Vosotros huiréis del fanatismo, huiréis de la idolatría; y así como el Maestro, cuando se Comunicó por vosotros, dijo que venía a Comunicarse por medio del conducto de carnes inmundas y pecadoras; así tenéis que seguir diciendo al mundo, que no sois Justos, ni Perfectos que nunca lo fuisteis, que habéis sido siempre pecadores; pero que, habiendo sido Escogidos por el Padre, os esforzáis por mejorar vuestra condición humana y espiritual.

74. Así entonces, en ese último Año, entregaréis los mejores frutos de vuestro Desarrollo y Adelanto al Pueblo Bendito de Israel; y los grandes increyentes, los hombres de ciencia y los filósofos, vendrán a Recrearse con la Voz del Maestro; vendrán a descansar de sus luchas y grandes sufrimientos, vendrán a recibir ellos también su Herencia, para levantarse por los caminos del mundo a esparcir la Verdad.

75. Que entre las Facultades también exista ese propósito; sed vosotros siempre un Juez Equitativo de vuestros propios trabajos y nunca estéis conforme con lo que habéis hecho, siempre dad más y más; y a aquel más humilde que se acercase a vuestro Protector, a aquel más torpe e insignificante, dadle el Mejor Trabajo; no reservéis las mejores Manifestaciones y Palabras solamente para aquellos que lleguen con buenas vestiduras, con cultura en su espíritu y en su mente, con representación ostentosa en su persona, ¡no!; para todos igual, a nadie distingáis; y entre Facultad y Facultad, tened siempre Armonía y Caridad de los unos para con los otros.

76. Pensad, hermanos Labriegos, que entre los Seres Espirituales que os Protegemos existe una Armonía Completa, una Fraternidad Perfecta; que entre unos seres y otros no existe división, ni crítica, ni falta de Caridad; que nos Respetamos y Amamos con el mismo Respeto y Amor con que nuestro Padre nos Respeta y nos Ama; y Respetamos los unos la Misión de los otros, con Respeto profundo; y Respetamos los trabajos de los demás Seres, como algo Equitativo y Justo, que no somos jueces los unos de los otros; y antes bien, en espíritu nos Ayudamos, nos facilitamos el trabajo, nos unimos en las grandes luchas y estamos siempre, los unos con los otros.

77. Os lo dice el Mundo Espiritual, hermanos míos, para que cuando a través de las Facultades, vosotros miréis que un Ser Espiritual critica el trabajo de otros; entonces tengáis la Certeza de que ahí no está el Mundo Espiritual de Luz, de que ésa es una torpe comunicación, una errónea interpretación, de que ése es un mal trabajo y es una materialización de la Facultad.

78. Si un enfermo, se acercase a este humilde Ser y el enfermo me dijese: –Hermano, otro Ser espiritual, me ha tratado y no he sentido ningún Alivio, vengo a que me trates tú”. ¿Sería propio de mi Espíritu que yo le dijese que aquel tratamiento, no fue correcto?… ¿Sería Justo que yo, ante aquel inocente, ante aquel enfermo, pusiese en evidencia, en duda a mi hermano espiritual y aun los trabajos de aquella Facultad?… ¡No, hermanos míos!…

79. Y cuántas veces contemplamos que, acercándose así los enfermos, de ser en ser, de materia en materia, no encuentran su Bálsamo; y cuando llegan a encontrarlo a través de alguna Facultad; entonces, aquella Facultad se envanece, y dice: –He aquí, lo que no pudieron hacer los demás Seres espirituales lo hizo mi Protector; lo que no pudieron hacer tantas Facultades, lo hice yo. …

80. Todo esto es indigno de que exista, en la Hermandad de Labriegos. Así, como ese pequeño ejemplo que he puesto, hay muchos actos que es necesario Corregir.

81. Un Ser espiritual, no puede ni debe ser reprendido por un Guía, ni por ningún Columna; podrá ser Corregida y Amonestada la Facultad; pero al Ser espiritual, ¡no!…

82. Si un Ser espiritual ha recibido Corrección de ellos, es por su Sencillez y Humildad; pero qué dolor dejáis impreso en aquel espíritu; no por la Corrección, sino por la ignorancia de aquél que ha osado en su torpeza, tratar de Corregir a un Ser de Luz que viene Enviado por Dios, desde el Más Allá a Comunicarse con este mundo, para Corregir, para Aconsejar y para Enseñar. ¿Es qué nosotros venimos a este mundo, para ser corregidos y reprendidos?… ¡No, mis hermanos!…

83. Cuando algún Guía o Columna sea Testigo de alguna materialización, de algún trabajo que sea incorrecto, o de alguna irregularidad háblese al Ser espiritual que se esté Comunicando, pero pidiéndole Ayuda a su Facultad a Prepararse; ya después a la Facultad, cuando se encuentre en su estado normal, háblesele y corríjasele; pero con Amor, con Espiritualidad; no se le delate, no se señale su imperfección públicamente, porque en uno de los Preceptos, el Padre, claramente lo dice.

84. Cuando un Ser espiritual se encuentre entregando un Consejo, no se le interrogue, no se corte su Palabra.

85. Cuántas veces, se nos causa esta herida; cuando estamos sanando al enfermo con nuestra palabra; entonces se acerca un Columna y nos dice: –Calla, hermano y entrégale la curación… cuando la curación, se la estamos entregando con la Palabra, porque son los enfermos que sedientos de Verdad y de Amor se encuentran, son los enfermos que no necesitan tónicos materiales, sino la Fortaleza, el Estímulo Espiritual.

86. Cuántos hay que no necesitan ni tan siquiera, una substancia material; sino solamente Esencia, Ternura, Caridad y Amor. Cuántos confundidos, cuántos perturbados y obsesionados, que solamente necesitan en su espíritu un Rayo de Luz; y en su cerebro, un átomo de Luz para desalojar las malas influencias que les invaden; y en veces se nos exige, que entreguemos, lo que el enfermo no necesita.

87. Lo más importante en la Curación Espiritual, en esta Obra, es: La Palabra y el Fluido Espiritual… todo lo demás, es secundario. Los medicamentos materiales son secundarios, cualquier médico humano los puede recetar, ellos tienen esa Misión, de sanar el cuerpo.

88. Nosotros venimos en pos del Maestro, a Sanar primeramente al alma y reubicar espíritu, con el Fluido Espiritual, con la Palabra de Verdad; eso es lo que importa, que la Humanidad Sane a su alma y espíritu, primero; y después, se sanará su cuerpo.

89. ¿De qué le sirve a un cuerpo estar lleno de falso saber, de vanidad, de materialismo, de riquezas falsas?… ¿De qué le sirve tener falsas grandezas y de qué le sirve tener su cuerpo sano, si en su alma y espíritu, se encuentra enfermo?

90. Dios no ha dejado su Solio en Tres Tiempos para traer como finalidad, sanar las enfermedades de los hombres, las del cuerpo.

91. Claramente lo ha dicho en todos los tiempos y aun en éste: “¡Vengo a buscar vuestro espíritu que es el que Me pertenece, porque vuestra envoltura le pertenece a la Tierra!” sin embargo, también el Maestro derramó Su Bálsamo en lo material para que, sanando el cuerpo, fuera un testimonio, una prueba para que despertara el espíritu; mas, lo importante es el espíritu, es el corazón.

92. Dejadnos, entonces, que impartamos esta Caridad al mundo. Ya veis cuántos que se acercan a nosotros con sus lacras, con su lepra, con sus grandes sufrimientos, ocultando en su corazón una historia muy larga de dolores, una historia de tragedias, de lágrimas, de luto y de sangre, de ingratitudes y sufrimientos; y al escuchar nuestras palabras, aún mojan el polvo de la Tierra con su llanto; cada una de esas lágrimas es un terreno de dolor, es un caudal de sufrimientos.

93. ¡Dejad que los ojos del hombre, lloren!… ¡dejad que las fuentes de dolor de los seres humanos, se desborden por sus ojos, para que descansen sus corazones, para que se Limpien de tanto dolor, para que se Liberten de ese peso que les agobia!…

94. Y recordad siempre que, en la Curación del cuerpo, los recursos naturales y los medicamentos que le sanan, son secundarios; esos los encontraréis en vuestro propio camino material; pero esos corazones que se desahogan con el Mundo Espiritual –que no tenemos egoísmo alguno, que no tenemos interés en esta Tierra, que nuestro máximo interés es vuestra Felicidad y vuestra Salvación– esos, hermanos, se levantan por los senderos llenos Gratitud; de Plácemes vuelven a levantar su faz a la Esperanza, vuelven a levantarse con Optimismo y con Fe, a la Lucha en el mundo.

95. Entonces, tendremos que sanar hablando, hasta que suene la hora en que el Padre también en su Justicia que es inexorable, nos diga: “El último instante ha sonado y no volveréis a Comunicarnos en palabra por el entendimiento del hombre; quedaréis solamente como ángeles Guardianes y Protectores de toda la humanidad; quedaréis como Guías invisibles del Pueblo de Israel, como Ejércitos espirituales Invisibles al ojo humano, que Veléis a la diestra de este Pueblo, Protegiéndole en la Lucha y así lo sigáis aconsejando; pero de espíritu a espíritu, a través de la Intuición, de la Inspiración y de la Revelación. …

96. Esperamos, hermanos, que todos los trabajos, todas las prácticas que se verifiquen en el seno de todos los Recintos: se Purifiquen, Adelanten, Progresen y se Perfeccionen… las prácticas que tengan que Purificarse, que se Purifiquen; las que tengan que desaparecer, que desaparezcan.

97. Queridos hermanos Labriegos de la Viña del Señor: Entre vosotros existe la costumbre de encender una antorcha, siempre que trabajáis. No todos, pero la mayor parte de los Labriegos, cuando van a algún lugar en donde no tienen una antorcha a mano, sufrís un disgusto, una contrariedad, porque habéis creado una necesidad, una costumbre de estas prácticas; y si esa antorcha, no está preparada, –como vosotros decís– entonces no trabajáis con Confianza, pensáis que no hay Luz en aquella estancia y estáis en peligro de ser poseídos por algún espíritu obsesor; y el Mundo Espiritual, en el Nombre del Padre, os dice, que estas prácticas, no son necesarias.

98. Que la Luz, la lleváis vosotros, en el espíritu; cada uno de vosotros, es una antorcha, hermanos míos, con Luz Espiritual y con una luz material, capaz de ahuyentar a la influencia de los espíritus inmundos y de Iluminarlos; de convertirlos; y que si algunos de ellos, llenos de turbación se levantan y por un momento hiciesen opacarse vuestra Luz, ahí está el Protector, por algo se llama Protector; Dios os lo ha confiado, para que él entonces no permita que vuestro cerebro, sea poseído de influencias que no deben poseerlo.

99. Pero si ha habido Labriegos que se han dejado poseer y obcecarse, no ha sido descuido ni culpa del Mundo Espiritual; no ha sido falta de Protección por parte de nosotros, es que ha faltado la debida Preparación de la Facultad, es que no se ha sabido Limpiar, ni Purificar en su pensamiento, de sus intenciones, de sus tendencias; es que en vez de Atraernos y de Asimilarnos a nosotros, nos ha ahuyentado con su desobediencia y pecado, con sus propias influencias de rebeldía; y entonces, el Padre, ha permitido que ellos, sean poseídos de las tinieblas y de los obsesores.

100. Pero la Facultad debidamente Preparada, Elevada de espíritu a Espíritu y llevando en su corazón la Justicia, el Amor y la Caridad; la Facultad que sabe abrir su entendimiento para darnos paso, que pone su Confianza absoluta en nosotros, en el Nombre del Padre; esa Facultad, no puede sucumbir, no puede ser mortificada, no puede padecer, no puede ser poseída.

101. Haced la prueba, hermanos Labriegos; y veréis, cómo esas antorchas no son necesarias; solamente es un acto de fanatismo, es una costumbre, es un hábito.

102. Nada recibe el mundo espiritual en confusión, con esas luces, porque al mundo espiritual no llega la luz material. Al Mundo Espiritual de Luz, solamente le Alumbra la Luz de Dios, la Luz de la Verdad, la Luz Clarísima del Espíritu Santo; y esa Luz, es la que os Baña a todos vosotros; porque sois los Hijos de la Luz.

103. ¡Qué necesidad tenéis de esos Símbolos!… ¿Qué necesidad tenéis de ese fuego que da luz material, en esos momentos tan Sublimes, como son cuando los hombres se Comunican con el Mundo Espiritual?… ¡Después del año 1950, ya no se deberán practicar estas costumbres, deben desaparecer antes!… para que entonces, seáis llamados y en cualquier sitio, sepáis Elevaros de espíritu a Espíritu.

104. Para vosotros, cualquier lugar sea el gran Templo de Dios, en cualquier lugar del Universo, porque dondequiera que estéis vosotros, está vuestro corazón y vuestro espíritu; y ahí está precisamente, el Templo de la Divinidad.

105. Si sois llevados a un presidio, si sois arrastrados a un lugar de fango, si sois llevados al cadalso, aun ahí podréis penetrar al Santuario del Padre; concentrándoos en vuestro propio espíritu, ahí encontraréis al Padre cual Maestro, Presente en lo más profundo de vuestro espíritu.

106. Y en los tiempos de lucha, los hombres no os darían tiempo de encender antorchas materiales; y para aquellos tiempos, debéis tener la Fe, la Confianza absoluta, de que vuestros Protectores siguen siendo vuestro Escudo; y aun cuando no volvamos a Comunicarnos a través de vuestros entendimientos y cuando las malas influencias en todo su apogeo se desaten en toda la humanidad, no temáis, que seguiremos siendo vuestro Escudo y vuestra Protección.

107. Pero, ¡ay!… ¡ay de aquellas Facultades o Pedestales!… que con Conocimiento de Causa nos invoquen, que nos den paso; porque nosotros, los seres de Luz, no somos desobedientes, porque jamás hemos venido a contradecir las Órdenes del Padre, porque no distorsionaremos y desoiremos su Ley, no confundiremos a las muchedumbres.

108. Entonces, si vuestro cerebro debe ser cerrado por la Voluntad del Padre; y después del año 1950, por desobediencia vosotros lo abrís, ¿a qué os exponéis, Labriegos del Pueblo de Israel?… ¿Quiénes serán, los seres que se aprovechen de vuestra desobediencia?… ¿Quiénes serán, los que penetren a través de las puertas de vuestra cerviz?… ¡Ah, hermanos Labriegos!… ¡Meditad profundamente todos y formad el Buen Propósito, de Obediencia y de Espiritualidad!…

109. Si en estos momentos, he explicado a mis hermanos Labriegos, que no son necesarias tales antorchas, porque por doquiera que estéis, vosotros seréis la Luz; y si os he dicho que, doquiera que vosotros entréis, ahí estaréis en el Templo del Padre; vuelvo a deciros, hermanos todos de la Viña del Señor, que la Obra del Padre es su Ley, es: su Justicia, Amor y Sabiduría… es su Doctrina, ésa es la Obra del Padre; Obra Divina que Él comenzó, al hacer brotar de su Espíritu Divino a la primera Criatura Espiritual; y Obra que continuó, a través de los tiempos, desde el nacimiento de todos los seres o espíritus, del Mundo y de la formación de todas las cosas.

110. Obra que Manifestó antes de Moisés a los primeros hombres de este mundo nombrado Planeta Tierra; Obra que continuó a través de Moisés, entregando los Dictados de su Divina Ley al espíritu de la humanidad; Obra que una vez más Confirmó y Continuó a través de Jesús, como el Verbo Encarnado; Obra que sigue Manifestando entre vosotros hoy, como Espíritu Santo, a través del entendimiento del hombre con palabra humana; y Obra, que seguirá Manifestando Espiritualmente y que continuará comunicándose de Espíritu a espíritu, después del año 1950 hasta la Eternidad Misma.

111. Ésa es su Obra, la Obra Espiritual de Dios, la Obra Universal de ese Padre de Justicia, de Amor, de Sabiduría y de Perfección; para que vosotros, cuando habléis a los seres humanos de la Obra del Padre, no queráis decirles que la Obra del Padre es la de este Tercer Tiempo solamente; que la Obra del Padre, es el conjunto de estos erróneamente nombrados “templos”, de estos Recintos y el conjunto de ceremonias y prácticas ritualistas que vosotros verificáis con prácticas materiales; el conjunto de Manifestaciones que como culto materializado, vosotros tenéis en vuestros Recintos, durante las congregaciones del nuevo Pueblo de Israel.

112. ¡No, hermanos míos!… todas esas prácticas y cosas en su conjunto, no forman la Obra. La Obra ya os lo he dicho, es Universal; y comenzó en el Padre y en Él concluirá. ¡Él es el Alfa y la Omega, es el principio y el fin!… cómo Él, os ha dicho en su Divina y Santa Palabra.

113. Y el Templo, cuando vosotros habléis del Templo de Dios, hablad de vuestro espíritu, de vuestro corazón. Cuando habléis de Recintos, son estas casas materiales en las cuales se reúnen las Porciones del nuevo Pueblo de Israel, para ser Doctrinados por la Divinidad; lugares, en los cuales vosotros os reunís, para recibir de Aquel Más Allá en vuestro espíritu, la Manifestación del Padre y de su Mundo Espiritual; pero Reconoced siempre, que el Templo en Esencia y por Esencia, es vuestro espíritu. Ahí es donde Mora el Espíritu de Dios, ahí es donde encuentra su Verdadero Altar, su Verdadero Culto, su Verdadera Ofrenda.

114. El Verbo Divino, ya os vino a decir en el Segundo Tiempo: “-¡No vengo a buscar templo hecho de piedra, el Padre no Mora en templos hechos por mano de hombre!…” y dijo: “¡Mi Reino, no es de este mundo! …” Como hoy, viene diciendo: “Vengo a buscar a vuestro espíritu, que es el que Me pertenece; no vengo buscando la materia, sino vengo buscando a vuestro espíritu. …”

115. Sí, hermanos, ahí está su Templo, ahí es donde Él encuentra la Verdadera Adoración, la Verdadera Comprensión: en vuestro espíritu… pues cuando vosotros, levantéis vuestra planta ya como maestros y penetréis en otras religiones a entregar la Doctrina del Espíritu Santo; entonces, los hombres os hablarán de iglesia, y desde ahora el Mundo Espiritual os previene y os Prepara.

116. Cuando los hombres os quieran sorprender con la palabra: Iglesia… vosotros conoced el Verdadero Sentido y Esencia de la palabra Iglesia. Ellos os dirán que Cristo, fundó su Iglesia en aquel Segundo Tiempo; y que Él, volverá a su Iglesia.

117. ¿Y vosotros qué podríais contestar, cuando eso os dijesen?… ¿podríais negar que esto dijera el Divino Maestro?… Si lo negaseis, mal haríais, porque Ciertamente el Maestro de maestros, así lo dijo; ciertamente Cristo a través de Jesús, dijo que Él venía a fundar su Iglesia.

118. Sin embargo, ¿a qué Iglesia se refería el Divino Maestro?… ¿Acaso a esa organización humana creada por los hombres, mucho tiempo después de la entrega de sus Apóstoles?… ¿Acaso a esa organización mundial de sacerdotes, de ministros, de cultos y liturgias materiales?… ¿Acaso, ésa es la Iglesia de Cristo?… ¡no, hermanos míos!…

119. La Iglesia, a la cual se refería el Señor en el Segundo Tiempo, es a sí mismo, al espíritu de la humanidad, ahí está su Iglesia, ahí es su Templo, ahí está su Santuario. Y a sus Discípulos, los dejó en aquel segundo Tiempo, como encargados de su Iglesia; pero no de una sinagoga, sino para que ellos cuidasen de que la Luz no se apagara en el corazón de los hombres, para que ellos levantasen el Verdadero Altar con su Amor, con su Sacrificio, en el espíritu, en el corazón de todos los hombres.

120. Ésa es la Iglesia, a que se refirió Cristo a través de Jesús; y esta Aclaración os hace el Mundo Espiritual, para que no os dejéis sorprender de los hombres; porque templo o iglesia puede estar en todos, aun cuando no se sea católico-romano o de otra secta de la misma.

121. Hermanos míos, la lucha con esa religión, será grande entre vosotros mismos; porque los principios son los mismos, mas la forma, la superficie y el culto exterior, no es el mismo.

122. Tenéis que conocer los principios para practicarlos, para no apartaros de ellos, porque estos principios, son de Amor, de Verdad y de Eternidad; y si esos principios lleváis y cultiváis vosotros, todo lo demás podréis combatirlo con Valor, con Entereza y con Conciencia.

123. No son ministros, ni sacerdotes, los que necesita el Templo de la Divinidad, lo que necesita la Obra del Padre; lo que ella necesita son Apóstoles, espíritus llenos de Abnegación y de Elevación, de Justicia, de Amor y de Caridad, de desinterés; eso es lo que necesita la Obra del Padre; no solamente dentro del Espiritualismo Trinitario Mariano, sino dentro de cualquiera secta o religión.

124. No son ministros, ni sacerdotes, ni teorías, lo que necesita la Obra del Padre; en su Ley, una vez más os repito: lo que necesita, son Apóstoles. …

125. Cuántos van por el mundo que, sin ostentar ninguna religión, son Apóstoles de Dios, ¿por qué?… porque practican la Auténtica Caridad, la Verdadera Elevación, Reconociendo que Dios los ha enviado, por Amor al Padre y por Amor al semejante; y si les preguntáis qué religión profesan, os dirán: –Ninguna, pero creo en Dios y trato de obedecer sus Mandatos. … ésos son más Apóstoles que muchos que ostentan títulos y Cargos y se dicen ser Discípulos del Señor.

126. El apostolado es de Abnegación, de Sacrificio; es de Amor, es de Renunciación también. ¡Cuántos de vosotros, penetraréis de lleno en el Apostolado del Señor, después del año 1950!…

127. Queremos que todos lleguen a ese punto de Espiritualidad, de desinterés y de Amor, de Caridad y de Sacrificio, que llegando todos a ese punto, hermanos, Israel estará Unido, Israel tendrá que Amarse, Israel tendrá que ser el Fuerte y el hijo Obediente de nuestro Padre Dios.

128. Cuando este Pueblo, –que hoy todavía no puede ser lo suficientemente Fuerte por su desunión– Unido pueda encontrarse, el mundo temblará; vendrá entonces una Revelación Espiritual en este mundo, cual nunca la ha habido. Las bocas de los oradores más importantes, no serían suficientes para discutir, para hablar, para discernir sobre estas Revelaciones; los unos afirmando y los otros combatiendo, todo se develará sobre las Escrituras de los Tiempos pasados.

129. Cuántos dejarán sus quehaceres, sus ideales, sus empresas, por interiorizarse en las revelaciones del espíritu; ¡cuántas críticas habrá para el Espiritualismo… ¡Cuántas persecuciones, cuántas delaciones, también calumnias!… pero el Espiritualismo llevado por los Apóstoles del Divino Maestro, debidamente Practicado por ellos –que sois vosotros– irá también Sembrando la Verdad e irá Despertando a los que duermen en su profundo letargo, no de días y de años, sino el letargo de los siglos.

130. Iréis posando sobre aquellos espíritus dormidos y muertos de las grandes religiones, la Luz a ellos; tenéis que ir a resucitar de entre los escombros, de debajo de sus propios ídolos, a levantarles a la Vida del espíritu, a la Libertad que ofrece la Obra Espiritualista.

131. ¡Qué tiempos de lucha y de revolución, le esperan al nuevo Pueblo de Israel y a la humanidad, hermanos!… ¡Qué tiempo, en que todo sea hablar de espíritu, de Dios y de su Ley!… Sin embargo, los hombres discutirán, desgarrarán y profanarán; mas no vosotros, Israel, ya vosotros mucho desgarrasteis, mucho profanasteis y ese tiempo de entre vosotros pasará.

132. No volveréis a pronunciar el Nombre de Dios sin Respeto, ni el Nombre de su Ley, sino siempre que lo hagáis, será con el debido Respeto a su debido Momento; entonces, sí seréis los Verdaderos Apóstoles, los primeros Labriegos de la Viña del Señor dentro de la Obra Divina; los primeros Sembradores del Espiritualismo, de la Paz, de la Espiritualidad; y se conmoverán las naciones, los pueblos y las instituciones del mundo.

133. Algunos de vosotros, no contemplaréis en materia, estas vicisitudes, estaréis luchando y trabajando en espíritu; otros, sí contemplaréis esas grandes luchas, cuando ya las canas estén plateando vuestra cabeza, cuando ya estéis contemplando las Nuevas Generaciones del nuevo Israel, sobre el haz de este mundo.

134. Y a propósito de las nuevas generaciones de Israel, en próximas reuniones hablaremos grandemente de estas generaciones; porque muchas de ellas, ya están entre vosotros y son vuestros hijos; los unos en tierna infancia, los otros en la adolescencia, otros en la juventud.

135. Tenéis una gran Responsabilidad, por eso a ellos Doctrinad y no dejéis que lleven fanatismo e idolatría; que ellos ya no contemplen vuestras lacras, que ellos no contemplen vuestra desunión, que ellos pisen con planta Firme, con Verdadera Espiritualidad, Practicando la Comunicación de espíritu a espíritu.

136. ¿En qué forma?… Practicando la Oración Espiritual, en el seno de vuestro hogar, en los momentos de peligro, en los casos de gran Aflicción para vosotros, en todas las pruebas; dándole vosotros importancia a sus sueños, a su Inspiración, dejando que ellos hablen entre vosotros de las Revelaciones del Espíritu Divino; proporcionándoles los Escritos de Cátedras y Mensajes del Mundo Espiritual, atrayéndolos a la Palabra del Maestro y acercándoles al Mundo Espiritual; pero con tacto, pues la niñez es indiferente a los asuntos espirituales, por su corta edad; la juventud es reacia, por sus ilusiones y ambiciones. Sí, hermanos, debéis usar el tacto, para no cansarlos; pero Vigiladlos, Conducidlos, Velad por ellos y Encauzadles por el Camino.

137. No creáis que vosotros, sois los únicos responsables porque habéis oído grandemente al Cristo de Dios; no penséis que los pequeños que han venido a oír y escuchar al Maestro de maestros, no han de tener Responsabilidades. Es muy grande la Responsabilidad de ellos y de vosotros; ellos, son los grandes Profetas, son los grandes Apóstoles, son los espíritus de gran Elevación; pero no dejéis que se envanezcan, no dejéis que ellos se crean Superiores; pero, Enseñadles que para que sean Grandes en espíritu y Verdad, tendrán que ser pequeños en la materia; que tienen que ser sencillos, Mansos y Humildes, pero con Humildad Sincera, no fingida.

138. Todo esto y más, tendréis que Enseñar a esas nuevas Generaciones, las responsables de la Obra, los espíritus Responsables del Espiritualismo en los tiempos venideros.

139. Así en este día, queridos hermanos, nos ha concedido el Maestro, hablar de muchas Revelaciones, porque es corto el lapso que os queda de este Tiempo y tenemos que Aprovecharlo.

140. No olvidéis lo que el Mundo Espiritual os Aclaró y os Explicó, para que, en el caso de que tengáis que Enseñar y dar pruebas, os levantéis como los Buenos Discípulos y Apóstoles del Maestro. Es lo que, en este día de Gracia, el Divino Maestro me ha concedido entregar a vosotros.

141. ¡Elevad, una vez más vuestra Oración de espíritu a Espíritu, por la Paz del mundo!… Mucho vuestra influencia espiritual, detiene el avance del dolor y de la destrucción entre los hombres; mucho también, la Luz de vuestro espíritu, Ilumina los entendimientos y el espíritu de la humanidad; la Emanación de vuestro espíritu, que es Saludable y Fuerte, llega a las naciones, llega a todos vuestros hermanos, porque para el espíritu no existen las distancias materiales.

142. Elevad también vuestra Oración, una vez más, por todo el nuevo Pueblo de Israel, para que la lucha que se ha entablado en el seno de él mismo, lleve a Israel, al Triunfo; el Triunfo, por la Liberación de todo lo superfluo; al Triunfo, en la Unificación; al Triunfo, por la Obediencia a aquel Padre, que solamente espera la Preparación de su Pueblo, para derramarse en Complacencias Espirituales.

143. El Triunfo entre vosotros, para que este Pueblo, no sea Despierto por el dolor, para que no sea la Justicia de vuestros gobiernos la que sorprenda a los Recintos, a los guías, a los Labriegos; para que no sean las enfermedades incurables, por su desobediencia, de no practicar la Oración Espiritual, como el Padre lo está Ordenando y Enseñando; sino que el Pueblo alcance, hermanos míos, ese Triunfo de la Espiritualidad, por medio de la Obediencia a los Dictados de la Ley del Padre Celestial.

144. Voy a ausentarme de entre vosotros, deseando que la Paz y la Fraternidad sean en todo el mundo y en particular entre el Pueblo de Israel. Para Servir primeramente al nuestro Padre Dios y después a vosotros. Humilde Ser Espiritual. … …

México, D. F., a miércoles 2 de febrero de 1949

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