Cátedra 1946 Ene. 6

Getting your Trinity Audio player ready...

Cátedra del Divino Maestro. Domingo 6 de Enero de 1946 Tema: ¡Seres impostores usarán la Palabra del Maestro de maestros para engañar!

¡Gloria a Dios en las Alturas y Paz en la Tierra a los hombres de Buena Voluntad! Gloria a Dios en las Alturas y pasa Mi Espíritu Divino, de la Escala de Perfección a la de Jacob, para enviar una vez más Mi Palabra entre Mi Pueblo Mimado de Israel, en este día 6 de enero de 1946, en que reunido podéis encontraros, Pueblo Amado, en representación de los Siete Sellos, de las Siete Iglesias que Elías, por conducto del hijo del hombre, vino a implantar por Mi Voluntad a la Tierra. Una vez más os recibo en Mi Regazo de Padre, por vos Bendigo y Perdono al Universo, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. …

(Elías, el Guía Espiritual)

¡Gloria a Dios en las Alturas y Paz en la Tierra a los hombres de Buena Voluntad!… Amo al Padre, Amo al Hijo, Amo al Espíritu Santo. … Espero del Padre, espero del Hijo, espero del Espíritu Santo. … Creo en el Padre, creo en el Hijo, creo en el Espíritu Santo. …

1. Maestro Divino, ¡he aquí al Pastor Incansable con el Rebaño muy Amado que viene Limpio de corazón y Manso se encuentra, siguiendo al Pastor!… que por un momento, he posado en su corazón y por un instante he roto el manto de tiniebla, para que en este momento inmensamente grande, se aposentasen Limpios y con la Luz de mi Espíritu en sus entendimientos para que ellos, sean Gratos ante el Ojo de Tu Divinidad, para que lleven en su corazón de Tu Fuerza y vuestra Palabra Sacrosanta, para que en su camino, se encuentren cual los Fuertes ante la humanidad.

2. En este momento, se encuentran con la Mansedumbre en su corazón; vienen cual los sencillos y humildes ante su Pastor; que les ha Preparado y en este momento, Yo tomo su cuita y su dolor. ¡Oh, Maestro, hágase y cúmplase en ellos y en el Pastor, Tu Sagrada y Divina Voluntad! …

[El Divino Maestro]

3. Sí, Elías Amado, un nuevo tiempo comienza para vuestro Rebaño, redoblando vuestra caminata podáis ser vos, que no queréis contemplar el tropiezo en las ovejas y presto descendéis en su paso a darles vuestra mano y alentarlos dentro del Camino Señalado.

4. Grande es vuestro Amor para la humanidad, para esta Humanidad que aún no os conoce; mas, el Santuario preparado para Elías, pronto edificado será; porque hoy, sólo un corto número de corazones, os lleva en el fondo de sí mismos.

5. Elías, Buen Pastor, vais a recrearos en este instante derramando vuestro Consejo Celestial, derramando vuestras dulces palabras, que Alivian, que incitan al Arrepentimiento y que Confortan; va a recrearse el Pueblo que es vuestro Rebaño, con vuestra Presencia, que por un momento, de lleno será en su corazón.

6. Sin embargo, Yo contemplo, Fuerte al Pueblo. El Verbo de Dios, cual Padre, en su primera Representación Divina, se ha derramado por Esencia, Presencia y Potencia en la primera alba del año 1946, revistiendo de su Fortaleza Divina, de su Luz, de su Gracia, a las multitudes; que poblando pueden ser, no sólo esta nación, sino todos los pueblos, provincias, naciones y aldeas de la Tierra.

7. Porque un Cargo y una Misión Sagrada le han confiado Mi Espíritu a cada uno de mis pequeños, en esa alba bendita en que ha dejado la Simiente de Regeneración, de Fraternidad, de Ahínco y de Espiritualidad; y esta Simiente, la ha derramado desde su Alto Solio como un Maná de Gracia sobre todos los hombres y todas sus criaturas sin distinción alguna.

8. Vais a encontrar a vuestras ovejas, fuertes; si alguna de ellas gimiendo puede encontrarse; esa, recibiendo, no ha sabido recibir, no ha sabido lo que en sus manos ha sido depositado; mas vos con vuestra Luz, enseñadles a contemplar el Tesoro de Valor Incalculable que el Padre, ha depositado en sus manos; para que no llore, para que no desespere, para que no pierda, todo lo que tiene en sus manos.

9. Elías Bendito, ¡Recreaos!… que todo cuanto en esta alba de Gracia entreguéis, ¡Efectivo será!… porque ésta, es Mi Voluntad. …

(Nuestro Guía Espiritual)

10. En el Alto Nombre del Padre Eterno Gran Jehová, en el Altísimo Nombre de la Segunda Representación Divina que presente es entre vosotros, Yo os Saludo y os doy la Bienvenida, Rebaño Amado; en el nombre del Padre, por conducto del Hijo y en Mi Nombre que Soy la Representación de la Luz del Espíritu Santo. …

11. Bienvenido seáis, Rebaño Amado, que en alba dominical por un instante habéis olvidado de las cosas y menesteres humanos, para poder venir a aposentar vuestra planta bajo el Árbol, en donde por un momento puede brindaros la sombra para que podáis descansar, de vuestra infatigable carrera humana que lleváis en esta tierra.

12. Bienvenido seáis, os dice vuestro Pastor, en este instante os acojo en Mi Regazo de Pastor y os doy Calor para que no tiritéis de frío en el camino, para que en este instante tan Sublime y grande para vuestro espíritu y vuestro cuerpo, podáis Percibir las Revelaciones Celestiales que en este momento a esparcirse entre vosotros, van a ser; y así, podáis olvidaros de las preocupaciones humanas y podáis darle al espíritu lo que tanto pide.

13. Sin embargo, mirad que yo -cual Buen Pastor- voy Preparándoos, para que con mi Luz, no os perdáis en los caminos trazados por el hombre; me aposento en vuestro camino y en vuestros hogares y en el resto del día y de la noche, cuando os encontráis solitarios, cuando ha invadido en vuestro corazón el sufrimiento y el dolor; el Pastor, Incansable es con el Amor incomparable, para una vez más daros mi Calor, para levantaros y aposentaros en el mejor Lugar que el Pastor tiene Preparado, dispuesto para su Rebaño muy Amado. …

14. En este momento, en que todos estáis esperando, el Pastor Limpia vuestro corazón; vuestro entendimiento lo Dispongo, alumbrándole con la Luz de mi espíritu para que os encontréis Preparados, para que recibáis lo que la Voluntad Omnipotente de nuestro Padre Celestial, os va a entregar; para que sepáis Comprender la Inspiración del Maestro de maestros y así las podáis esparcir en vuestro camino; porque contemplo que desde tiempo ha, el Pastor ha sido cerca de vosotros, siempre ha sido Preparándoos para que ya no busquéis las veredas intrincadas; sino sigáis la Huella de vuestro Pastor, que Yo voy delante Guiándoos por el Camino Recto, para que no os perdáis.

15. En este instante, a vuestro corazón Rebaño Amado, lo conforto. ¡Llevad Mi Luz!… Mi Manto lo hago jirones y a cada uno os encubre; y al corazón de la madre que se aflige, le digo: no os olvidéis de mí; y yo os ayudaré… tomad un átomo de Luz de vuestro Pastor; Lucido vuestra mente, vuestro cerebro y Conciencia, para que podáis darle el Cariz acertado a la Lección de la Enseñanza Divina, que vais a recibir, para que no os confundáis. A todos os entrego Mi Perdón y Bendición, en el Nombre del Padre, por conducto del Hijo y en Mi Nombre que Soy la Representación de la Luz del Espíritu Santo. …

(Elías se dirige al Divino Maestro)

16. Maestro Divino, he ahí a mi Rebaño, también los postreros se encuentran hambrientos y sedientos, porque no llevan consigo, lo que en mucho tiempo ha llevado el Rebaño; mas ellos también se encuentran Dispuestos, antes les he pasado por las aguas del Jordán, para que se encuentren en el Aprisco y se encuentran Blanquecinos y hágase en ellos y en todos los corazones, en las naciones y comarcas donde se encuentran con la ira, lo que sea Tu Voluntad. …

[El Divino Maestro]

17. En Verdad, contemplando puede ser la tierna oveja que Me hacéis presente; mas no temáis, el Postrero queda a Mis Cuidados como lo habéis dejado; y en corto instante, la oveja se encontrará harta, porque la habéis depositado ante Mi Planta y ante Mi Mirada Divina; mas, las naciones formadas por varones y mujeres, niños y ancianos, por corazones llenos de vicisitudes y angustias, ¡todas recibirán!, porque ésta, es Mi Voluntad.

18. Elías: ¡Id a las naciones, entresacadlas y enseñadles incesantemente y hacedles el Llamado y que el eco de la Campana sonora que os he entregado, sea escuchado por doquier, porque se acerca el momento en que Mi Rayo Divino a través del entendimiento, sea circundado y escuchado por millares y millares de seres humanos.

19. Sí, Elías, vos trabajaréis y lucharéis incansablemente, hasta que el aprisco de Amor, pletórico pueda encontrarse de los Míos, de los que van a luchar en Mi Nombre y por Mi Causa, por la Redención del género humano.

20. Os habéis recreado, habéis derramado vuestras Bendiciones a través de esa envoltura, sobre esta multitud que atentamente os escucha y se prepara por vos, para oírme y escucharme más tarde a Mí.

21. ¡Bendito seáis, Elías!… ¡Unificaos a todos, Unificad a los Recintos, Unificad a los entendimientos de los cuales Yo Me serviré, Limpiad el camino!… y con los Ángeles que a vuestra diestra y siniestra, se encuentran: ¡alejadles por un instante las tentaciones!… para que Mi Pueblo, dé un paso en Firme hacia adelante, porque ésta es Mi Voluntad.

22. ¡Aposentaos a Mi Diestra!… y desde ahí, recreaos con Mi Presencia y Mi Palabra. ¡Velad por vuestras ovejas y cumplid con vuestra Misión!…(Elías al Maestro)

23. Con Tu Permiso Divino, en corto tiempo serán presente ante Tu Divinidad, todas mis Ovejas; los unos en materia y los otros en espíritu; los cuales, se Recrearán con Tu Enseñanza Divina.

24. Rebaño Amado: Quedáis aposentados ante la Planta Divina… no perdáis la Lección de la Enseñanza Divina que vais a recibir. ¡Qué la Paz del Pastor, quede en vuestros corazones!…

[El Divino Maestro al Pueblo]

25. Discípulos Mimados de Dios, vengo una vez más a Despertaros de este sueño profundo, de ese letargo en que caéis a cada instante. Paso Mi Mano por vuestra frente y espero que vuestros ojos se abran para mirar Mi Faz; y cuando Me siento contemplado por vos, Mi Mirada penetra hasta lo más profundo de vuestro espíritu, acerco Mi Labio a vuestra frente y deposito el Ósculo Divino en vos; tomo vuestra diestra y la estrecho con Mi Mano y es cuando os sorprendéis, os levantáis y os postráis delante de Mí y os arrojáis en Mis Brazos y Me preguntáis: Padre, ¿por qué tanta Paciencia y tanto Amor?…

26. Sí, Pueblo, hay veces que os confundís al contemplar cuánta Paciencia, cuánto Amor y cuánto Perdón hay en Mí para vos. ¿Quién de vosotros ha sido padre en la tierra? ¿Quién de vosotros ha deseado el dolor para el hijo cuando ha recibido el dolor por la propia mano del hijo más mimado? La herida se ha abierto en lo más profundo de vuestro corazón, el sentimiento os ha embargado, el enojo muchas veces ha turbado vuestra cabeza; mas, nunca habéis deseado el mal ni el dolor para aquel hijo; y cuando más airados os habéis encontrado delante de él, una palabra de Arrepentimiento, un átomo de humillación de aquel hijo, ha bastado para enternecer vuestro corazón.

27. Esos sois los humanos, los imperfectos, ¿qué os extraña de Mí si Soy Perfección y os Amo con un Amor incomprendido, no presentido todavía por vuestro propio espíritu y os Amaré hasta la Eternidad. En Verdad y en espíritu, derramaré Mi Sangre invisiblemente -sin alarde- para que Viváis invisiblemente, haré Méritos para que vos viváis y os Salvéis; mas, bien sabéis, Pueblo Escogido, que una Luz interna hay en vos, que un Don Espiritual os dice que debéis Corresponder al Padre.

28. Pueblo Escogido, si Vos Me necesitáis, si Vos Vivís de Mi Amor y de Mi Propia Vida, si Vos os Recreáis con Mi Existencia, Yo también necesito de Vos. ¡Miente aquel que diga que no Me hace falta, miente aquel que diga que Yo no os necesito!… porque en Verdad y en espíritu, Yo contesto a aquel y contesto a vosotros: Que vosotros habéis brotado de Mí y que sois Mi Propia Divinidad, que sois parte de Mi Propio Espíritu, de Mi propia Esencia y que mientras no estéis en Mí -por el pecado y la impreparación- el Dios, el Absoluto y Poderoso, sentirá la ausencia de los hijos, ¡créalo el hombre o no lo crea!…

29. Por eso, no os extrañe, Mis hijos, que vengo en este Tercer Tiempo a Manifestarme por el conducto de materias pecadoras, Yo no vengo a contemplar el pecado; Yo no vengo a contemplar ese pecado, como un obstáculo para llegar a vos; Yo sólo vengo a ver vuestra necesidad, la falta que os hago, sólo vengo a buscaros para recrearme con vos y si manchado podéis encontraros, Yo he Preparado la existencia humana y a vuestra alma, para que en ella, Lavéis vos mismo vuestras propias manchas; Sentiréis, que al momento que vayáis vos sintiendo vuestra propia Purificación, os acercáis más a Mi propio Regazo.

30. Pueblo Bendito, mucho tiempo he hablado de esta manera; muchos varones y muchas mujeres Me han oído en este Tercer Tiempo y Me han creído; y otros Me han negado; unos han proclamado que Yo he vuelto entre los hombres; y otros, han proclamado que esto, es imposible.

31. Yo estoy aquí, y no vengo a esperar la mucha o poca Fe de los hombres para por ello mismo permanecer entre los hombres, Yo cumpliré con Mis Altos Designios, Yo cumpliré como Dios, como Padre, como Maestro y como Juez; y cuando el instante haya llegado, Yo Me ausentaré. En el Segundo Tiempo no esperé que el Mundo se Convirtiera para apartarme del Mismo. Yo partí cuando la duda, la burla y el escarnio Me rodeaban; Mi Propia Ausencia, Mi Muerte aparente fue el Testimonio más grande y el Testamento más Preciso que dejé a la humanidad.

32. Nuevamente Conmoveré al Mundo y en el instante de su propia duda, de su turbación de ideas y de teorías, Me ausentaré; pues para el final del año 1950, -Señalado por el Padre como el último que estaré entre vosotros- la guerra de ideas y de teorías, entre las religiones y sectas, invadirán la Tierra de un extremo al otro; será en esa etapa de esta Era, cuando Mi Nombre ande de boca en boca y el Nombre de Mi Obra, sea desconocido por unos y Bendecido por otros.

33. Y entre las Multitudes, Mis Escogidos, luchando a diestra y siniestra y Doctrinando, abriendo brecha para Mi Obra Divina, atravesando algunos los mares, todos llenos de Fe y de Confianza en Mí, llenos de Fuerza y de Esperanza en la Convicción y Conversión de los pueblos de la Tierra; mientras Yo, desde aquel Más Allá, Espiritualmente les animaré instante tras instante con Mi Prodigios, con Mi Fuerza y Mis Manifestaciones que a cada instante y momento, ellos les brindarán por su propia Preparación. ¿Quiénes son ellos?… Sois vos, Mi Pueblo muy Amado, ¡créalo el hombre o no lo crea!…

34. Estáis Conmemorando un día de Gracia, estáis Conmemorando con la Preparación de vuestros corazones, aquel día en que los hombres de la ciencia humana y los pastores, llegaron al establo de Belem, con sus presentes para el Dios Niño.

35. Hay corazones que Me preguntan: -¡Padre, ¿es Verdad, que aquellos hombres se inclinaron delante de Ti?… ¿Es Verdad que aquellos hombres, Te Reconocieron, en su propia Humildad?… Sí, Mis hijos, las ciencias llegaron ante el Unigénito del Padre, con su presente, para inclinarse delante de Él; delante de Aquel, que no era científico y todas las ciencias y las Naturalezas, las llevaba en su Alma.

36. La riqueza y el poder, llegaron también a inclinar su cerviz humildemente y para depositar su Ofrenda delante de Aquel que –aun siendo Dueño de todas las cosas- no tenía algo material, ni quería algo de la Tierra; y los humildes también llegaron, el Pueblo desgarrado y despreciado por los grandes, los corazones sencillos y humildes que vivían en las montañas y en los valles llegaron también, para depositar la Ofrenda sencilla pobremente labrada con el sudor de su frente; para llevar un presente de Alegría, un presente de Consuelo a aquella Madre y una Bienvenida en esas tierras, al que llegaba al mundo; mas en Verdad, os digo: Hubo quienes permanecieron sordos y ciegos… hubo quienes durmieran en su profundo letargo, sin sentir siquiera los pasos de aquel que había llegado; los ministros de las religiones, seguían insensibles y sordos hacia Mí.

37. Sí, Pueblo, los que diciendo llevarme muy dentro de ellos mismos, Me han arrojado -tiempo ha- de su propio corazón; todos ellos, no sintieron Mi Llegada, ellos no depositaron su Ofrenda al Mesías Prometido por el Padre, desde el Tiempo pasado, porque es más insensible el corazón y el cerebro del hombre dedicado a las ciencias humanas, es más insensible el corazón del poderoso y metalizado; es mucho más Sensible, el corazón del rudo e ignorante que el corazón del hipócrita y fariseo, que lleva sólo falsedad y la tiniebla en sí mismo, aun ostentando la aparente Santidad de Fuerza y de Verdad en el espíritu.

38. No envolváis nunca Mi Nombre ni Mi Enseñanza, en leyendas; Yo vengo a destruirlas con Mi Palabra y a dejar de lo escrito, sólo lo que fue Cierto y lo que ha de ser Cierto; mas, si hay corazones que Me han preguntado, si esto fue, Yo ya os he contestado: vuestro Padre, permitió estas vicisitudes, no para que las tomaseis superficial y materialmente; sino para que penetraseis en el Fondo y Esencia de estas Revelaciones a través de sus Manifestaciones y alcanzaseis a Comprender toda la Humildad del Padre, toda la Grandeza de su Obra y toda la pequeñez humana. …

39. El Pueblo ha Preparado un Santuario en este Tercer Tiempo; y en ese Santuario, Yo penetro para aspirar el perfume de su corazón, el perfume de vuestra Oración que cada día se Eleva más y más en busca de Mi Espíritu y que un día llegará, en que desde este mundo, viváis en aquel Más Allá, en que podáis penetrar por medio de la Oración, en aquellas Regiones de Paz y de Luz que a cada instante os invitan, os abren sus Puertas para que pueda saborear vuestro espíritu de aquella Vida y de aquella Esencia, para que aun cuando vuestros pasos pisen sobre abrojos y espinos, vosotros como espíritus, transitéis sobre flores y sobre el césped, de aquel Más Allá.

40. En este Tercer Tiempo, he venido a Morar entre los hombres; en los Tres Tiempos, ha sido difícil la existencia de Mis Revelaciones en este Planeta; y Yo, he venido a Enseñar el Camino del espíritu en los Tres Tiempos; Yo he enviado a hombres que Me han creído, que Me han Cumplido y que han sabido Interpretarme. Cuán pocos han sido estos, como también en los Tres Tiempos, ha habido multitud de corazones que han interpretado mal este Camino, que han interpretado incorrectamente Mi Enseñanza y la Doctrina que debe Regir a espíritus encarnados y desencarnados; y debido a ello, es que con Paciencia Infinita, Me presento nuevamente entre los hombres; y hoy, os digo: Os encuentro, mucho más materializados que en los Tiempos pasados. …

41. Habéis formado un mundo científico, habéis metalizado vuestro propio corazón, habéis entorpecido vuestras facultades y vuestros sentimientos Morales y Espirituales y a pesar de ello, Yo sé que hoy podréis Comprenderme mejor que en los Tiempos pasados, porque a través de vuestra jornada escabrosa, de vuestra jornada llena de vicisitudes, de experiencias y desengaños, habéis recogido la Luz y habéis Evolucionado. Hoy que os sentís más lejos de Mí, es cuando con un solo paso podéis poneros a Mi Vera.

42. ¡Heme aquí nuevamente, humanidad!… Enseñándoos el Camino inexorable por el que tenéis que pasar; no cuando Yo quiera, no cuando Yo os lo mande, no cuando Yo os obligue, sino cuando vosotros lo queráis; cuando vosotros, revestidos de Humildad, de Reconocimiento y Buena Voluntad, emprendáis el Camino de la Luz con la frente en lo alto, el corazón Convencido, con el paso Firme, lleno de Mansedumbre y de Amor.

43. Por eso, os he entregado en los Tres Tiempos, por eso os he entregado en este Mundo, todo lo que habéis Menester; por eso el pan de cada día, no se ha se ha acabado, ni el aire se ha extinguido, ni la luz del sol se ha acabado; por eso las aguas persisten; por eso os deje para que os conservéis, para que sigáis caminando y lleguéis un día a la Razón, lleguéis un día a penetrar en vos mismo; y entonces, Me Contempléis en Todo cuanto Existe

44. Sí, Pueblo, para que Me contempléis dentro de vos mismo y fuera de vos; puesto que, hay quienes han pregonado que no Existo, sin saber lo que sus labios dicen, ni los que su corazón quisiere sentir.

45. Hay quienes, niegan el Más Allá, sin saber que dentro de sí mismos, llevan un Más Allá Espiritual, cuán pocos han sabido penetrar dentro de sí mismos, cuán pocos han llegado al fondo de su propio ser o espíritu.

46. Pueblo Amado, ¡no vengo a mentiros con palabras floridas, porque el expresión florida no pertenece a Mi Verbo Divino; Vengo a hablaros con Palabra sencilla, simple y Clara, con la cual puede entenderme y Comprenderme el sencillo y humilde y pueda convenceros por medio del entendimiento humano.

47. Os he venido a Revelar estos Conocimientos en este Tercer Tiempo, porque no pertenecían a los Tiempos pasados, ni al Primero ni al Segundo Tiempo. Alguno de vosotros, sabéis que Yo en el Segundo Tiempo os prohibí abrir las puertas del Más Allá, para tener Contacto con el mundo espiritual; Yo dejé cerrada esa puerta, Yo dejé prohibidas esas Revelaciones, ¿por qué?… ¡No lo sabéis!… no fue Mi Voluntad, permitiros esas Comunicaciones.

48. Mas, siempre he gustado de sorprender al hombre, para demostrarle a los seres humanos que no viven en Preparación, ni en Comunión Conmigo; que son los olvidadizos de las Promesas, de las Palabras, de las Profecías; mas, en Mi Alto Solio, Decretado y Escrito estaba que Espiritualmente Elías, -el Enviado del Tercer Tiempo- había de llegar con Llave de oro invisible, -con Llave Celestial- a abrir la Puerta del Más Allá; para que el Más Allá, tuviera de lleno acceso en el corazón de los hombres.

49. Vine, no al corazón de la humanidad; sino al corazón del Pueblo de Israel, a Preparar su corazón y su propia cerviz, para que el cerebro del hombre durante este este Tercer Tiempo de Mi Comunicación Divina, fuera la Puerta abierta que diera acceso y Bienvenida al Mundo Espiritual; para que así en la mente del hombre, el intelecto humano, fuera el Espejo en donde reflejara la Inteligencia de los seres de aquel Más Allá. En el año 1866, fue permitido por el Padre este Don, fue concedida esta Gracia a los Elegidos del Pueblo de Israel; pero en Verdad, os digo: Permitidas por el Padre, habían sido muchas Manifestaciones de espíritus, antes del año 1866 -en todas las naciones y en esta Misma Nación- como Señales de Precaución, Precursoras del Tiempo en que el Más Allá, había de Manifestarse y Reflejarse en este valle Terrenal de lágrimas y dolores.

50. El Padre contemplaba la debilidad de los pequeños que moraban, en aquel Mundo invisible en el valle de las almas y de los que moraban en este Planeta Tierra; sin embargo, siempre el Padre, os ha enseñado la Unión, siempre el Padre ha gustado de la Armonía, de la Amistad, de los Lazos de Afinidad de los unos con los otros; y en su Propio Espíritu, el Padre, ansiaba el momento de este Tercer Tiempo de Comunión Divina y Espiritual, para Entrelazar a los espíritus de un Mundo hacia los de otro Mundo, para Enseñarles, que no están lejos los unos de los otros, para enseñarles que no hay Razón para que estén distanciados; que las distancias y el tiempo, no existen para el espíritu, que basta sólo el Amor, el Respeto, la Oración para atraerse mutuamente espíritu con espíritu.

51. Pero esa hora, no había sido Marcada antes, porque en Verdad, os digo: ¿Quién os pudo haber enseñado, antes que Elías y después que Cristo?… ¿Quién podía haber enseñado a vosotros, Lecciones de la Enseñanza Perfecta, para no caer en ciencias nombradas espirituales, en desconcierto y en turbación; y para no penetrar en la luz aparente y confusión, referente a Mis Revelaciones Sagradas?… ¡Nadie!… Sólo el Padre, permitió las Señales y Manifestaciones, en las naciones de este Mundo; mas, desde el año 1866, la Puerta quedó Abierta para vosotros; para que vosotros, hoy con esta Mi Enseñanza de Luz, de Respeto, de Celo y de Pureza para Mi Mundo Espiritual, para que todas Aquellas Manifestaciones que pertenecen a ese Más Allá, vayáis y enseñéis a los seres humanos; y no dejéis ni permitáis que profanen más, no dejéis que desgarren ni que manchen, lo que Inmaculado y Puro puede encontrarse, en Verdad y en espíritu.

52. ¿Me Comprendéis, Mi Pueblo?… Cuando vengan los hombres hacia vos y lancen sobre vosotros anatemas y sentencias, ¡no temáis!… Yo Soy, más que los hombres; Yo os he anunciado ya, estas vicisitudes; Yo os he entregado la llave invisible, para que abráis las puertas invisibles del Más Allá; y entonces, cuando la necesidad les agobie, podáis tener la Presencia, la visitación de los grandes Seres Espirituales y ellos puedan impartirles el Bálsamo, el Consejo, el Camino, la Luz, la Palabra.

53. También, sabéis que cuando es Mi Voluntad, cuando Yo lo permito, aquellos Seres Espirituales de los que fueron parte de vos, han podido acercarse entre vosotros, ¿para qué, Pueblo Amado?… para que ellos transiten y Testimonien de lo que es aquel Valle, para que ellos vengan a Testificar que las distancias no existen para los espíritus; que aquellos ámbitos Espirituales, pueden estar dentro de vuestro corazón; que vos podéis también, morar dentro de aquellos mundos no materiales; vienen a vos, Mi Pueblo, para que ellos puedan estrecharos a Vos; y no los olvidéis, porque los lazos con que Yo uno las Familias, no son lazos temporales; si esos lazos en lo material se rompen por la muerte y la destrucción de la carne; esos Lazos de Amor, quedan vinculados y Unidos Espiritualmente, para toda la Eternidad.

54. En ese Más Allá de la carne, veréis que os encontraréis con vuestros Amigos, encontraréis a vuestros padres, a vuestros hermanos, a vuestros hijos, a vuestros esposos y esposas; a vuestros protectores y a todos aquellos seres que habéis Amado y a los que habéis pertenecido y que eternamente seguiréis formando Familia Allá, en donde no existe ya la división, en donde no existen ya las naciones ni las fronteras, ni los límites humanos; todos serán para todos, como Yo, el Padre Soy para todos Mis hijos; pero esos Lazos de Amor, nunca se romperán.

55. Habéis contemplado que también a través de esas puertas que os he confiado, tienen acceso los espíritus que están en tiniebla; mas, no toméis a esas manifestaciones como a revelaciones malas y superfluas, mirad que la Vida Espiritual es semejante a la Vida en la existencia material; si existen vicisitudes, sufrimientos y dolores muy grandes y muy cruentos, en el corazón de los hombres; también existen en el sentir de los espíritus del Más Allá, espíritus que os rodean; espíritus que pueden convivir con vosotros, como convive el ser humano y ni pueden tampoco Ascender y pasar, hacia el Valle Espiritual.

56. El dolor de esos Seres Espirituales en ese ámbito ni material ni espiritual, es más grande que el de los seres humanos; sin embargo Yo os he Enseñado a que los Reconozcáis, a que los miréis con Amor y con Espiritualidad, para que les deis la Bienvenida en vuestro propio corazón y les tendáis vuestra ayuda espiritual, como hijos de Israel.

57. ¿No recordáis que Yo, el Maestro, en aquel Segundo Tiempo, a los que vos llamabais endemoniados, Yo los traté con Dulzura y con Amor?… En Verdad y de Cierto, os digo: Los demonios no existen… ante Mi Mirada Perspicaz y Amorosa, sólo existen Mis hijos; los unos, los otros y los demás, a los que Yo busco; a aquellos que no tienen la Luz, para entregárselas con Ternura y Amor y puedan Sentirla y Contemplarla; porque el que no tiene la Luz peca y en sí, no sabe que ha pecado; pero cuando recibe la Luz, Reconoce y se Arrepiente y ya no vuelve a pecar. Mas, entonces, ¿por qué no habríais de Recibirlos a ellos, espiritualmente?…

58. Han de venir grandes censuras, debido a estos acontecimientos; y si alguien os censurase, es que tampoco tiene la Luz suficiente como para Comprenderlo; y entonces, tendréis que ir a imitación del Maestro en el Segundo Tiempo. Impartid la Luz a los materiales y a los Espirituales. Grande, muy grande es la Misión de este nuevo Pueblo de Israel, Misión que debéis Reconocer y Amar, para que impartáis la Luz en todo instante y en todo momento.

59. Mirad, ¡cuán gran Don, qué hermoso Don os he confiado!… sin convertiros a vosotros en científicos, ni en filósofos, ni en doctores, ni en teólogos, ni en ministros. No quiero que tengáis título alguno, dentro de Mi Obra; si Yo os Nombro a los unos Pedestales, Guías a los otros, Facultades a los demás, Columnas, Piedras Fundamentales, Plumas de Oro, Videntes; es para distinguirlos en sus propias cualidades y para que reconozcan su Don; mas no vayáis nunca por los caminos diciendo, Yo soy esto, yo soy aquello, sólo derramad el Amor y la Caridad Mansa y Humildemente.

60. Es Mi primera Página que en alba dominical, en el presente año, os entrego; año en el cual, Pueblo de Israel, vais a Aprender grandes Lecciones; año, en el que voy a derramarme en vos, en Palabra Divina: En Justicia, en Amor y en Sabiduría. …

61. No Me dejéis sólo, Pueblo Mimado, tengo mucho que hablar con cada corazón; Palabra por Palabra, con Ellas, estoy formando la Herencia Divina para cada uno de vosotros. ¡Ya estáis en la Consumación de los Tiempos, ya es el último Tiempo en que estaré en esta Forma entre vosotros, Mi Pueblo.

62. ¡Creed en esto, Mi Pueblo: Que no volveré a detenerme en la Tierra, ya no estaré Materializándome en forma alguna hacia el hombre… mas, he Venido a hacerlo: En Tres Tiempos… pero después de estos Tiempos, ya no volveré a Materializarme con Palabra humana; ya no volverán a oír ni a Escuchar Mi Divina y Santa Palabra, de esta manera en este Valle Terrenal.

63. Sin embargo, llegará el instante en que los seres humanos, os digan: Aquí está Jesús, ahí está Cristo… pero vosotros, les diréis: ¡No, Cristo, se encuentra como Verbo Sacrosanto en el infinito Universal; y directamente desde el infinito, se Comunica Espiritualmente únicamente con aquellos que se Preparan a recibirle Directamente de Espíritu a espíritu… Así, estad alerta, para que nadie os engañe; porque ¡Yo jamás volveré a Encarnar ni a materializarme en palabra humana hacia este Mundo!…

64. Entonces, serán los hombres los que Escalen por la Escala del Cumplimiento Espiritual y de la Oración, hasta llegar a Mí; y puedan Sentir, cómo Mis Brazos los estrechan, cómo Mis Besos son en vuestra frente y cómo Mis Palabras e Inspiraciones son en su Mente, Conciencia y espíritu, en Verdad y en espíritu.

65. Todos Sentiréis Mi Esencia Divina, si ya estáis Preparados; pero si dormís, si no os Espiritualizáis un átomo tan siquiera; entonces, ¡mesaréis vuestros cabellos y crujiréis vuestros dientes y blasfemaréis!… entonces, negaréis que Yo os hablé desde el infinito; entonces, invocaréis Mi Rayo y buscaréis vuestros propios conglomerados; y diréis a la multitud: -Hermanos, ¡Prepárense de espíritu y de materia, para que Aquel que nos dio su Palabra a través del cerebro humano hasta el año 1950, vuelva por la atracción de nuestras Oraciones!… y realzaréis entonando los mismos cánticos y romperéis el silencio con vuestros Coros y con el ¡Hosanna y Gloria a las Alturas!… y el Rayo del Verbo de Dios, ¡no descenderá ni vendrá a vosotros!… sin embargo, si muy grande fuere, la necedad de esas multitudes; entonces, será el ser impostor quien tomará materia, para tratar de imitarme; e intentará hablaros, con las mismas palabras que en este Tercer Tiempo, el Maestro de maestros, os hubiese entregado.

66. ¿Queréis estos acontecimientos, Mi Pueblo?… -¡No, Maestro Amado!… Me dicen vuestros corazones; pues entonces, ¡Preparaos!… para que después del año 1950, la Voz del Maestro materializada a través de estas envolturas, no se oirá jamás, porque ya no es Mi Voluntad; porque desde ese instante, sólo Mi Inspiración Divina, -Espiritualmente- brillará en las mentes más espiritualizadas de las grandes multitudes; pero en particular, en las de Mi Pueblo de Israel.

67. Sin embargo, si antes del año 1950 no se hiciere la Unificación entre los Recintos Espiritualistas, la confusión reinará muy pronto, en Verdad y en espíritu; porque, muchos Recintos seguirán invocando Mi Palabra, seguirán invocando Mi Rayo; y entonces, el Príncipe de la impostura en este Mundo, entregará sus palabras y su falsa luz, para lograr confundir al Pueblo y a las multitudes; y se pretenderá desatar nuevos Sextos Sellos, surgirán falsos Marcados nuevos, se levantarán falsos guías y profetas y falsos dioses, y ¡ay!… ¡ay de las multitudes y de gran parte de este Nuevo Pueblo de Israel!…

68. ¿Qué no habéis presentido que esto, puede llegar entre vosotros?… Mucho os he hablado de Unificación, mucho os he hablado de Perdón; mas, no se ha levantado un corazón que Me atienda, que entienda y Comprenda, que tenga Compasión de este nuevo Pueblo y que tenga Caridad de la humanidad. ¡No, en Verdad!… No se ha levantado alguien, con suficiente Amor ni con Caridad.

69. Todavía vuestros corazones, esperan el desencadenamiento de los Elementos, esperan que las nuevas ciencias humanas descubran nuevas armas para la destrucción; esperan el hambre, la peste, las plagas desconocidas hasta hoy; esperan que todo ello venga, cuando no exista ya un rincón ni en los vientos, ni en los mares, ni en la superficie de la Tierra, ni en las entrañas de Ella Misma, para poderos Proteger y Refugiar de todo ello.

70. ¡Pueblo, Escuchad Mi Palabra!… Ha empezado en este día, llena de Dulzura y quiero terminarla llena de Dulzura; pero es Menester que os Prevenga.

71. Habéis emprendido esta Jornada y quiero contemplar que lleguéis a la meta, todo aquel que lucha por una Causa, debe alcanzar como Premio su propia Victoria, el Auténtico Apóstol, debe alcanzar la Corona del sacrificio y la diestra de su Maestro.

72. Así, Mis hijos, todo aquel que lucha, debe obtener su Galardón; Luchad por Él, para que podáis Obtenerlo; que para ello, os vengo a entregar Mi Fuerza, os vengo a conceder Mi Luz en este Tercer Tiempo, tan lleno de Luz, tan lleno de Recordación.

73. Pueblo de Israel, Yo vengo a Preparar vuestros propios corazones; y venís como reyes y como pastores, a saludar a la Madre, a dar la Bienvenida al Tierno Niño.

74. Yo Soy el Eterno Niño, porque siempre Estoy Naciendo en el corazón de cada uno de vosotros. Yo Soy el Eterno Unigénito, porque la Pureza y la Esencia de la Tierra, Vive siempre en Mí.

75. Así vengo a vosotros, y así venís también a Mí; y no traéis ahora en vuestros brazos, la tierna espiga de Trigo, para entregársela a la Madre; no traéis la torta de pan, no traéis la leche y la miel; no vienen los magos de oriente, con el incienso, la mirra y el oro; venís sólo, con vuestro corazón Conmovido, con vuestro espíritu Preparado en Reconocimiento hacia Mí, para decirme: -¡Padre, cuán maravilloso es Tu Amor para con los seres humanos y cuánta Caridad y Luz, has entregado a todos Tus hijos; has venido siempre en busca, de los que siempre Te estamos faltando. …

76. Y ahora, os digo, Mi Pueblo: ¿Por qué olvidáis estas costumbres, del Pueblo de Israel?… Bien es, que Yo vine en aquel Segundo Tiempo; y fue también, para borrar muchas tradiciones superfluas de vuestro propio corazón; pero, ¿por qué cuando vuestros hermanos dan a luz un tierno niño, no los visitáis?… ¿Por qué no vais a la casa de aquellas que han dado a luz a nuevo niño, para llevarle el Consuelo y la Alegría a su propio corazón, después de su sacrificio; y para depositar, vuestro beso fraternal en su frontal y llevarle un mendrugo de pan?… ¿Por qué no le lleváis la leche y miel?… ¿Por qué no preparáis una torta de pan, para aquella que en el lecho puede encontrarse?… ¿Por qué no vais a tomar en vuestros brazos al tierno niño y ayudarle, para que sus primeros pasos no sean tan amargos, en este valle de lágrimas?…

77. En esta Alba de Gracia, en este día 6 de Enero del año 1946, Yo hago volver aquellas hermosas costumbres a Mi nuevo Pueblo de Israel, en el Recinto La Fe y en los Recintos que en Mi Voluntad he Preparado, para que lleven siempre Consuelo a los que lleguen a este Mundo; para que vayáis a entregar vuestro Consuelo a aquellos que por medio de su dolor y su sangre, han dado animación de Vida a un nuevo ser humano, a un nuevo Siervo de Mi Divinidad, que ni sabéis qué Misión traiga a la Tierra.

78. Pueblo Mimado de Israel, ¿Me habéis Comprendido?… Yo os concedo la leche y la miel, llevad la torta, que Yo os ayudaré a compartirla y a formar hermosa costumbre en el Seno de este Pueblo Escogido y Mimado, para que después los demás pueblos de la Tierra os imiten y se Unifiquen. Yo os Bendigo y Perdono, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. … Preparo vuestros corazones, para que sepáis recibir, a todo aquel que os visita. …

{María Madre Universal}

79. El Ángel del Señor anunció a María y concibió por Obra del Espíritu Santo. … ¡He aquí a la Esclava y Sierva del Señor, hágase en Mí según su Palabra!… Maestro, Amado Mío, desde que la Luz de esta alba brilló sobre la Tierra, sobre esta Nación Privilegiada Mi Efluvio Divino he derramado sobre el Pueblo Escogido, la Oración se ha Elevado de Él, hacia Ti, todos han esperado en esta Alba de Gracia, el Consuelo, la Paz y el Recreo para sus espíritus. Todos vienen a Ti y te hacen presente su corazón, su Humildad, de él y lo que han recogido en el camino.

80. ¡Es grande el dolor de la humanidad!… y en este día, sólo Te hacen presente la amargura de sus labios, su corazón marchito, sus lágrimas y sus angustias. Cristo Amado: Las naciones lloran, los niños piden, las madres imploran… todos vienen en este instante ante Ti, todos han recibido Tu Presencia, porque has derramado Tu Espíritu en todos los seres y las creaturas de la Tierra. ¡Bendito sea Tu Nombre, Bendita sea Tu Caridad!… La Madre, en estos instantes se aposenta también delante del Pueblo, para que tenga el Calor y Mi Presencia; y en este instante, en la Unión de vuestro Espíritu con el Mío, ¡hágase por esa Unión, en ellos y en Mí, Tu Divina y Santa Voluntad!…

[El Divino Maestro]

81. Divina Madre, vive todavía en vuestro Seno de Virgen, la Esencia del cuerpo que llevasteis; el Templo, adonde Yo Oré como Dios hecho hombre, por todos los seres humanos; el Templo adonde Me hice hombre, para estar -por un Tiempo- cerca de sus corazones.

82. Venís ante ellos, en Alba de Gracia. ¡Miradlos cómo Conmemoran!… ¡Miradlos cómo recuerdan todavía!… Ellos, -Mis Marcados- estuvieron presentes en aquel Segundo Tiempo, todos ellos fueron Testigos presenciales; ahora, se estremecen con la recordación; para la carne, es una sorpresa; dicha para el espíritu, es el Eterno Presente. ¡Oh, Dulce Madre!… ese Tiempo, que no pasa; porque Ellos, están en Mí y Conmigo; y Yo, Estoy con Ellos.

83. Vuestro Manto Divino es desgarrado, vuestras manos lo han hecho jirones para entregárselo a la humanidad, porque así es vuestro Amor Perfectísimo, vuestro Amor Maternal; y pedís por los que lloran, porque sois Madre, porque no sois Juez; sois Intercesora, no venís acusando a alguien; sólo venís a decirme lo que sufren vuestros hijos, lo que necesitan de Mí, lo que están esperando, lo que desean, lo que hace tiempo Te piden.

84. Sin embargo, ¿qué podéis pedirme?… ¡oh, Poseedora de Mis Dones y de Mis Gracias!… ¿qué Yo, no os conceda?… Id al corazón de todos vuestros hijos y derramad vuestro Amor Maternal en ellos, en este Día de Justicia; y dejad en ellos: Mi Amor, Mi Voluntad. … En este tiempo de Restitución, vengo lleno de Ternura a mirar la faz del Pueblo de Israel, vengo seguido de vuestra presencia para que todos los pueblos y todos los hombres gocen con su Caridad.

85. ¡Derramaos en Paz, derramad una gota de Bálsamo en los enfermos, Bendecid los caminos, alejad a los espíritus de guerra, apartad las tinieblas y las tentaciones de los hombres, Unidlos, haced que los hombres se Amen y se Perdonen entre sí, que los padres Perdonen a los hijos y los hijos a los padres, que el esposo Ame a la compañera y la compañera al esposo, que haya Paz en el seno de los hogares!… y entonces, Madre Purísima, vuestra Familia Amada viviendo en Paz, contemplará la construcción de un Templo, de un Santuario que tenga su Base en este Mundo y su Cúspide en el Más Allá. ¡Es la Torre de Israel, la Torre Espiritualista Trinitaria Mariana, cuya campana resonará en todos los ámbitos de este Mundo y en el Universo entero!…

86. ¡Aquí está el Mundo, Madre, día por día se acerca la Justicia, se acerca el Juicio para cada quien y cada cual!… y por Vos, Reconocerán los Humildes, al Pueblo; después, se convertirá el hombre de la ciencia; aquel escudriñador, -los menesterosos- al final de cada camino que escudriñen sus ojos, Me Contemplarán; doquier Me verán y confesarán al fin que Yo Estoy con ellos y a Mí se convertirán.

87. Después, se convertirá el poderoso, el enfurecido y metalizado, cuando él mismo se vaya despojando de su propia falsa grandeza humana; finalmente se convertirán, todos aquellos que dicen Conocerme, todos aquellos que dicen Rendirme adoración y pleitesía en la Tierra, ellos serán los últimos; ellos serán los que más Me nieguen, los que más Me persigan, los más distanciados, los que luchen más en contra Mía y de Mi Doctrina Espiritualista; pero también llegarán, porque Yo tengo medios, porque Yo Soy Supremo Poder y les Amo.

88. Yo les Prepararé el camino, cuando el instante sea llegado; y también, Me Reconocerán; y cuando en este Mundo -por primera vez en la existencia del Planeta Tierra- su moradores, vivan un segundo de Amor; este Mundo, alcanzará esta Caridad dentro de los demás Mundos Espirituales; este Mundo se Elevará y Sentirá más cerca la Presencia del Reino de Dios, en Verdad y en espíritu.

89. Si en este Tiempo, los hombres acordaran un solo instante, Elevar un pensamiento hacia Mí, Yo, en Verdad, os digo: Los tentadores asombrados por esa Unificación de espíritu, se ausentarían; y las tentaciones, se alejarían por siempre de este mundo; mas, nunca los hombres, se han Unificado ni un segundo, en tantos siglos, en tantos miles de siglos en este Planeta; por eso siempre tentaciones y tentadores, han hecho su reino en el corazón de los hombres.

90. Y hoy, venís Vos, María, -que habéis quebrantado y seguiréis quebrantando aquella cabeza tentadora y soberbia- venís, a aposentaros con los vuestros; y extendéis vuestro Manto Celestial, con vuestro Efluvio e influencia de Ternura Divina, Espiritualmente; y cubrís, no sólo a este Mi Pueblo; sino, a todos Mis hijos muy Amados que son vuestros hijos. ¡Dadles la leche y la miel!… ¡Dadles la Esencia Maternal de vuestro propio Ser, para que Vivan Eternamente!… porque Viven, por Mi Sangre y por vuestro Sustento Maternal Divino también. …

{María Madre Universal}

91. Hágase Tu Voluntad, Cristo Amado, ¡oh, Virtuoso Maestro de maestros, que en este Tercer Tiempo, una vez más estás Alimentando con el Pan de Tu Espíritu a este Mi Pueblo!…

92. ¡Oh, Amado Salvador que no ha muerto, que no se ha ausentado de sus párvulos, ni de sus Discípulos; que no ha dejado que el Mundo se pierda!… ¡Bendito seas!… ¡Cuántos hombres ignoran Tu Presencia! ¡Cuántos hombres no saben de Tu Caridad, ni de Tu Grandeza en el Tercer Tiempo!… Sin embargo, Mi Espíritu va a tocar su corazón, va a hacerlo Sensible, va a Prepararlo para que en el instante llegado Reconozcan Tu Presencia, durante este Tiempo de Tu Comunicación Divina. ¡Bendito seáis, Maestro Divino!… por lo que Me has concedido en esta Alba de Gracia, para este Tu Pueblo. Voy al corazón de Tus hijos, de Tus Discípulos, de Mis Niños muy Amados; y en él, voy a recrearme. Con Tu Divino y Santo Permiso. …

93. En el Nombre del Padre Eterno Gran Jehová, en el nombre de la Segunda Persona que presente es entre vosotros y en el nombre de Mi Castísimo Esposo, la Madre os e Saluda y os Bendice, ¡oh, Pueblo!… en esta Alba de Gracia. ¡Bendito seáis, Pueblo Amado, Pueblo Heredero de la Verdad, de los Dones y Gracias de vuestro Padre Celestial; que una vez más, habéis Despertado en este Tiempo y estáis Alimentándoos con el Pan de Vida Eterna.

94. ¡Apresurad vuestra planta, porque vos sois el Emisario de las naciones, porque vos sois el Consolador de este Mundo, cuando el Padre os encomiende tan delicada Misión antes de su partida.

95. ¡No durmáis un instante, no dejéis que los soles pasen sobre de vuestra sien, Preparad vuestro corazón y vuestro espíritu!… ¡Mirad que las naciones lloran, mirad que los hombres se pierden en el camino anchuroso de su pecado y su ignorancia!… ¡No lo dejéis perecer, Pueblo Amado, porque más tarde, lloraríais cuando contemplaseis vuestra mano enriquecida con los Dones y el corazón de vuestro hermano, yerto para siempre!…

96. ¡No, Pueblo Amado!… Aprended a conocer la necesidad de vuestro hermano y a Consolar y a llamarlo en el instante Propicio; para que así, podáis Reanimarle, podáis darle Vida y Luz al que lo ha Menester.

97. En esta alba de Gracia, en que vuestro espíritu y corazón se han Preparado, en que el Templo de Dios se encuentra Engalanado con la Esencia y la Pureza, con los Méritos también que vais recogiendo en la Tierra, con vuestra propia Lucha y trabajo; Yo, os Bendigo, Yo penetro en Vos Pueblo; y en este instante, escucho cada uno de los latidos de vuestro corazón.

98. Sé cuál es vuestra petición, Pueblo Amado, sé que en estos instantes os olvidáis de vos mismo, para pedirme por los demás.

99. En este instante, lleno de Calor Espiritual vuestro espíritu, lleno de Consuelo y de Paz vuestro corazón; pero pensad, que hay otros que no tienen el Calor de una palabra, la Dulzura de una Caricia y por ellos Me pedís; y en este instante, vaya a ellos Mi Caridad, Ella sea con las naciones de la Tierra, sea con aquella nación que tanto ha sollozado; y desciende esta Caridad a vuestro corazón, para vos Israel; para vuestra nación Amada, sea Mi Bendición y Mi Paz; sea en vuestro corazón, el Consuelo y la Luz, que de Mi Espíritu, sea la Gracia; baño del Efluvio de Mi Espíritu, a vuestros corazones.

100. Una vez más, os digo, Pueblo Amado. ¿Qué puede pedir y Sentir el hijo, que no Sienta la Madre?… Vuestro dolor, es Mío. Yo en este instante, lo recojo de vuestro corazón y os doy Consuelo y Paz, os doy Dulzura; enjugo vuestras lágrimas, lleno vuestro corazón de Fortaleza, os Animo en el Camino y os tomo de la mano, para que sigáis delante hasta el final de la Jornada.

101. En este instante, ¡pedid!… ¡Pedid al Padre Creador!… Pedid, al Divino Maestro, que sus manos llenas están de Gracia y Caridad para vosotros. Mucho alcanzaréis en esta alba de Gracia, porque su Espíritu, derramándose está sobre su Pueblo Amado.

102. No calléis vuestros labios, Conversad con Él, -con vuestro Padre- para que así, contempléis su Misericordia y Caridad; las Lecciones de su Enseñanza, guardadlas en el fondo de vuestro corazón y llevadlas a través del Camino como vuestra Luz, -cual vuestra Norma y Guía- y Practicadla.

103. Yo en este instante, os dejo Unidos, formando la Armonía del Reino del Padre. Dejo en vosotros, la Paz, Mi Bendición, Mi Caricia y Mi Ósculo de Paz. Vivid en estos instantes aquellos momentos Venturosos; ¡no los olvidéis!… para que vuestro espíritu, viva aquel Segundo Tiempo y Grabado, se encuentre en él; porque para él, los tiempos no pasan.

104. En este instante, sentid el Regocijo con que esperasteis la Llegada de Mi Hijo muy Amado, del Cordero Inocente que el más tarde pudo ser inmolado por Amor a los seres humanos, en el Ara de la Cruz. En este instante, dadle cuanto sea -en vuestro corazón- de Amor, de propósito para que Él, Bendiga vuestras familias, vuestros hogares y las generaciones que de vosotros, han de brotar. Mi Espíritu derramo sobre vosotros, su Bendición y su Perdón en el Nombre del Padre, por conducto del Hijo y del Espíritu Santo y en Mi Nombre que Soy la Madre. …

{María, se dirige al Divino Maestro}

105. Mis Criaturas, Mis Niños, Me han escuchado, ¡oh, Amado Salvador de los hombres que no Te apartas un solo instante de ellos!… son ellos, quienes se apartan de Ti, quienes olvidan Tu Palabra y Sacrificio; pero Tú, eres el Paciente Padre, el Maestro incansable, el Pastor Humilde que siempre estás reuniendo las ovejas en el Aprisco del Señor Perfecto.

106. ¡Recréate con ellos!… Es corto el número, de los que Te llevan; pero ellos Te Sienten, Te Reconocen y Te Aman; y mañana, cada uno de ellos, será un Discípulo y un Apóstol de Tu Divinidad. ¡Bendito seas, por la Caridad y Dones que Me has concedido para toda la humanidad, en esta alba de Gracia!…

[El Divino Maestro]

107. Una vez más, María, Dulce Madre, habéis gozado ante la Presencia de la humanidad, una vez más os habéis hecho presente a través de una materia, desde la Altura de Mi Solio, en donde también vos pedís, llegue la petición de estos Mis hijos.

108. Les encuentro Dignos a todos, les encuentro Preparados en Razón y en Elevación, sí, ellos saben lo que les habéis dado, Madre; si, ellos esperan contemplar, lo que en el futuro han de encontrar, lo que Me han pedido en este instante; mas, ¡cuánta Alegría y cuánta Paz disfrutarán!…

109. Yo haré, Purísima Madre, que Mi Pueblo no se despoje de la Gracia y Dones con que les habéis revestido, vos; la que todo lo tiene, vos la poseedora de los Dones y Gracias, habéis convertido a la humanidad, una vez más en vuestro niño, en vuestra criatura y le habéis traído en esta alba de Conmemoración, un presente. A la niñez bendita que en este nación y en todas las de la tierra elevan su espíritu a los cielos esperando sólo un recuerdo para ellos, Yo en Verdad les concedo una lágrima, extiendo Mi Mano y desde Mi Reino Bendito envío Mi Ósculo de Paz y Mi Caricia para toda la niñez de este tierra en el nombre de Mi Madre, les hago sentir Mi Calor, les dejo el Pan de cada día y les preparo el Camino para que puedan pronto encontrar lo que es Mi Voluntad, la Paz de su espíritu, la Paz de su cuerpo: una gota de Mi Bálsamo.

110 Vosotros, Mi Mundo Espiritual, aquellos tres seres Benditos, recordados en vuestra historia, ellos en esta alba de Gracia, llenos de Luz y de Dones visitarán, espiritualmente, los hogares de la humanidad, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, y en el Nombre de María la Madre. …

{María madre Universal}

111. ¡Gracias, Maestro de maestros!… por todos los Beneficios que has concedido en Mi Nombre y por Mi Humilde Petición. …

[El Divino Maestro]

112. De Gozo se halla vuestro espíritu, Madre; un tiempo más vuestras lágrimas seguirán cayendo, un tiempo más las quejas de los hombres Me haréis presente; mas esperad un corto instante, que después vendréis radiante de Dicha Divina para decirme que los hijos han sido Rescatados, que el hijo Pródigo está en Mi Mesa y que vos habéis preparado el mejor Manjar, porque los hijos Pródigos del Tercer Tiempo, encontraron en la Alcoba del Padre, no sólo al Padre; sino también, a una Madre. Sed a Mi Diestra y desde ahí, el Calor de vuestro Regazo, sea Sentido en todos los ámbitos de la Tierra. …

{María Madre Universal}

113. Así sea, Cristo Amado, en este instante de esta materia Me aparto; mas no Me ausento de Mis hijos Amados, presente estaré durante esta alba en los hogares y corazones preparados derramando Mi Bendición y Mi Caricia a toda la humanidad. La Paz de Mi Espíritu, Mi Gracia y Mi Caridad dejo en vos, Pueblo Amado. … ¡Adiós, Pueblo Bendito!…

[El Divino Maestro al Pueblo]

114. ¡Bendito seáis! Mi Pueblo, vuestra Ofrenda es recibida por la Madre y es Bendecida por vuestro Maestro. Yo os Bendigo y Perdono en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. …

[El Divino Maestro a los Postreros]

115. Bienvenidos sean los que en este día de Gracia han llegado a Mí atraídos por el Testimonio de su propio hermano, para escuchar la Palabra que en este día clama en el desierto.

116. No es difícil Comprenderme, no es difícil Comprender esta Obra, todo aquel que despojare su entendimiento tan solo un poco, alcanzará a Comprender Mi Presencia y Mi Obra; mas todo aquel que no se despojare de sus propias ideas, de sus prejuicios, no podrá Comprenderme. Limpiad por un instante vuestro entendimiento y vuestro corazón para que de esta manera, podáis probar las aguas de Mi Fuente; pues si vuestra mano está manchada, si está sucia y tomáis de estas Aguas, las Aguas se contaminarían, en el hueco de vuestra mano irán contaminadas a vuestra propia boca, por eso Purificad antes vuestra mano; y entonces, Mis Aguas Cristalinas calmarán la sed que traéis en vuestro espíritu.

117. Muchos hombres, han llegado a Mí en este Tercer Tiempo, más que en Aquel Segundo Tiempo; son más los que Me rodean en esta Tercera Era, que los que Me rodearon en aquella Segunda Era.

118. Son las Tribus del Mismo Pueblo que condujo Moisés, que día por día, se van acercando para circundar a su Maestro.

119. Entre esas Tribus, han estado los que grandemente Me han negado y los que más Me han de negar. ¡Ahí están!… a Mi Diestra, Amándome como Discípulos, circundándome como Labriegos; por eso no juzgo mal al que Me niega, tengo Paciencia para con él; y le concedo una Gracia, para que pueda por medio de Ella Misma, Convertirse y después servirme a Mí.

120. ¿De dónde venís, Postreros?… ¿De dónde llegáis en este Tiempo?… ¡Ni vosotros Mismos, lo sabéis!… ¿Cómo podéis dar Testimonio de Mí, doquier de esta Misma Nación?… No es lo que os pregunto, eso ya lo sabéis; Yo os he preguntado algo, que no podéis contestarme, ¿de dónde vienen vuestros espíritus?… No lo sabe la materia, lo Sabe vuestro espíritu; mas, no le está dado por ahora Recordarlo a través de la envoltura de su materia. Yo, sí lo sé: Venís de un camino lejano… venís de muy lejos.

121. En Verdad y en espíritu, traéis mucha hambre y mucha sed; y en el interior de vuestra alforja, no hay algo que comer; contemplad vuestra calza, está destrozada; mirad vuestra túnica y vuestro vestuario, demostráis la desnudez; el sol durante el camino, ha requemado vuestra faz, los sufrimientos y vicisitudes, han encallecido vuestro corazón; las enfermedades, os han agobiado.

122. Hay quien Me dice: ¡No, no he llegado así, delante de Tu Presencia!… Bien está, Postrero, ésa es la influencia de vuestra envoltura de materialidad, la que Me responde, porque viene ataviada, porque tiene monedas en la Tierra y tiene pan de cada día; mas, el Maestro, contempla a los espíritus, que son a los que viene buscando; y esos espíritus, se muestran delante de Mi Mirada Perspicaz: Llenos de pobreza, llenos de vicisitudes… en Verdad y en espíritu.

123. Sin embargo, en este día en que no os quiero que os sintáis agraviados con Mi Palabra, en que sólo vengo a descubrir a vuestros propios espíritus; Yo, os digo: Os Limpio en este momento, os doy Mi Perdón, os absuelvo y os concedo una Vestidura Blanca como ampo de la nieve; y os harto, en Mi Banquete Espiritual… ¿quiénes de los que han necesitado en este día Bendito, no han comido de Mi Palabra de esta alba de Gracia?… ¿Quiénes no se han alimentado con el Pan de los panes, en esta Alba de Luz?… pero, Yo quiero hartaros, quiero que llevéis la carne del mejor Cabrío, que he puesto en la Mesa el mejor Pan y el mejor Vino para que podáis hartaros de estas Viandas Espirituales y llevéis Vida de por Siempre.

124. ¡No olvidéis, Mis hijos, Mi Palabra!… Palabras Benditas, Palabras que son pronunciadas por Aquel que le dijo a Lázaro: ¡Venid fuera!… y si vosotros, Me volvéis las espaldas y moráis lejos de Mí, -en el fondo de vuestro corazón y Conciencia- Recordaréis Mis Palabras; y estas Mis Palabras, os levantarán a la Vida Verdadera, porque ésta es Mi Voluntad.

125. Al enfermo, le entrego Mi Bálsamo; al pobre el Pan, una Llave del trabajo y una moneda; al hambriento, le entrego una torta de Pan; al sediento, las Aguas inagotables que calmen su sed; al manchado, le Acaricio, le Lavo y le Limpio; y a las abandonadas, a las solitarias, -en este instante- les acompaño, Me acerco hacia ellas, para decirles: ¡No estáis solas!… Una prueba, un sufrimiento, una vicisitud no grata, tiene que Acercar a Mí a cada quien y a cada cual.

126. ¡Tomad todos!… Lo que os quité, no os lo quité; sólo lo retuve por un instante y ahora, os lo devuelvo. La Salud, la devuelvo a los enfermos; el Pan, a los escasos de pan; el trabajo, a aquellos que han contemplado las puertas cerradas. Los corazones que lloran la ausencia de un corazón Amado, éste pronto será entre vosotros, en vuestro seno, en vuestro Regazo, porque ésta es Mi Voluntad.

127. A los que sufren en el seno de vuestro hogar, porque las tentaciones han echado raíces ahí, ¡tomad!… que Yo os entrego en este instante, una Vara de Justicia, que es la Oración; con la Oración y en el Nombre de Dios Todopoderoso, ahuyentad y alejad a las tentaciones de vuestro seno y vuelva en el mismo la Paz.

128. Yo os concedo una prueba -en este año- al que tenga Fe en Mí y no se aparte; Bendigo su Fe y en este mismo año, levántese a Mi Servicio, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. …

129. ¡Llevad el Testimonio Sencillo, Claro y Verdadero a los demás!… ¡Llevadles la Buena Nueva, llevad Simiente a vuestro hermano y Amigo, a vuestro pariente!… y podáis Preparar vuestras palabras, en Mi Nombre; y Yo, os Inspiraré, Yo hablaré por vuestro conducto.

130. ¡Aparto la venda de oscuridad!… y no volveréis a caer en ella misma; ninguno, os hará caer nuevamente, en las tinieblas. Yo os concedo un Rayo de la Luz de Mi Espíritu Divino, para que Contempléis el Camino, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. …

131. Pueblo Amado, ¿estáis conforme con Mi Voluntad?… Llevad Grabada indeleblemente Mi Palabra en vuestra propia Conciencia, llevad -en Vos Mismo- la Presencia de Elías, de María y de vuestro Maestro, que han estado en lo más profundo de vuestro corazón en esta alba de Gracia, para Recrearse en Vos, Mi Pueblo; y Revivid aquellos instantes, para volver a Vivir en el Segundo Tiempo.

132. Yo os Bendigo, Pueblo, os Sano; enfermo, os acompaño, ¡oh cansado de su Vida, en la existencia humana!… ¡Bendita seáis una vez más, niñez Bendita!… por vosotros, alcancen los varones y las mujeres. Madres de familia: ¡Bendigo vuestros senos, Bendigo vuestras entrañas que han dado animación de Vida, calor y sustento!… Entrañas infecundas, sea en vosotras, la Fecundidad. Gabriel, -el Arcángel de Mi Gloria- no sabéis el instante en que os anuncie, el que vais a hacer madres, entre este Mi nuevo Pueblo de Israel.

133. Madres Fecundas: No sabéis, ¡cuán grande es vuestro Galardón!… ¡Apurad vuestro cáliz, con Paciencia!… Madres ancianas, que Me habéis entregado el fruto mucho tiempo ha, que habéis formado a vuestros hijos y ahora ellos, por sí solos caminan. ¡Yo Bendigo vuestras canas!… sois la sombra de vuestros hijos, sois el Consuelo y la Luz para ellos mismos; y en vuestros últimos años de existencia humana, aun los vais acompañando; ¡Preparaos!… que Yo abro Mi Mano, para recogeros en Mi Seno y daros el Descanso que habréis menester.

134. Todavía los ancianos, pueden decir: -Padre, después de vivir tanto y de luchar tanto en esta Tierra, ¿iré a encontrar sólo el castigo, en el Más Allá?… ¡No, Mis hijos muy Amados!… Yo no castigo a ni uno de Mis hijos, Yo estoy presto a recoger el espíritu de los que ancianos parten al Más Allá, para entregarles la Fuerza, para darles la Caridad, la Caricia y el Reposo en Mi Seno; y más tarde, la Eternidad.

135. Juventud Amada: ¡Preparaos!… para que así, podáis llegar cerca de Mi Espíritu, porque ésta es Mi Voluntad. La Paz de Mi Espíritu -en este instante- dejo en el corazón de todos Mis hijos; y por vosotros, alcancen todas las naciones.

136. Bendigo montes altos y bajos; caminos y veredas, lugares todos de la Tierra; mares, lagos y ríos, caminantes y navegantes, hombres de todas castas y linajes, Yo los Bendigo.

137. Naciones, comarcas y aldeas llevad Mi Luz; hospitales y lechos de dolor, campos de guerra donde todavía los hombres en su necedad se levantan invocando al espíritu de guerra, Yo les derramo Mi Luz y les acorto el tiempo, porque la Justicia del Padre muy cerca, muy cerca puede encontrarse. No hagáis que caigan en tentación. ¡Pueblo tras pueblo, nación tras nación y potencia tras potencia, no forméis conflictos!… porque entonces, no sabéis lo que en Juicio, preparado puede encontrarse. Yo os entrego Mi Luz y Mi Paz en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. …

138. Aguas represadas, en las vasijas de Mis pequeños: Yo os transformo en esta alba de Gracia, en Aguas del Jordán, en Bálsamo para los enfermos y Regeneración para todos aquellos que han menester, en Mi Nombre que Soy el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Adiós, Pueblo Amado!…

¡La Paz del Maestro, quede entre vosotros!…

México, D. F. Día 06 de Enero del año 1946.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *