Sanación

La sanación de los enfermos es una misión distintiva de la doctrina Espiritualista Trinitaria Mariana. Entendemos que se encomienda a quien conoce el amor de Dios ayudar al prójimo. La sanación espiritual es algo que no se acaba de entender por el mundo científico de nuestros días. Dentro de los templos y fuera de ellos existen muchos hermanos que dependiendo de su preparación espiritual ayudan a los más necesitados, cumpliendo así con la más importante ley de Dios que es el amor: "El amor a Dios, al Autor de la Vida, al Padre, al Creador, y el amor de los unos a los otros".

Las potencias y dones del espíritu son atributos que han sido revelados y por medio de una vida honesta y limpia de pensamiento, llena de actos nobles y de trabajo para ayudar a la humanidad son desarrollados.

La sanación y la espiritualidad en general, será desarrollada en todo el mundo, incluso dentro de las diversas religiones que hoy entienden la espiritualidad de modos diferentes. El mundo apenas presiente que las enfermedades más dolorosas, no son las del cuerpo, sino las que llevamos en el espíritu. Y grandes serán los milagros que nos dará el Padre en esta era.

• 2-39-12: La oración es una gracia que Dios ha entregado ¡al hombre para que le sirva de escala para elevarse, de arma para defenderse, de libro para instruirse y de bálsamo para ungirse y sanar de todo mal!

DIFERENTES ESPIRITUALISTAS TRINITARIOS MARIANOS

Ya desde las primeras cátedras de antes del año 1950 se advirtieron muchos acontecimientos que hoy podemos ver realizados, de entre ellos ya el Padre advertía nuestro proceder actual y hoy existen diferentes grupos que cumple cada quien en diferentes formas.

El principal motivo de separación ha sido la forma en que cada quien interpreta lo que es correcto. Al igual que cuando un hermano espiritualista detecta que en su templo o en sus reuniones existen irregularidades, generalmente busca otro recinto o la compañía de otros hermanos, los cuales lleven el cumplimiento de la obra de una forma más limpia. También así al paso de los años se han generado distintos grupos tan diversos que en ocasiones parecieran de origen completamente diferente.

Sin embargo en la lucha por escalar y cumplir como pueblo y de forma individual, existen puntos sumamente importantes a mejorar en cada uno de los recintos y grupos. Debiendo de prestar mucha importancia a lo siguiente:

•No caer en Idolatría ni fanatismo: El espiritualista de ningún modo debe caer en la idolatría de símbolos, imágenes, personas, vestimentas, libros, espíritus, etc.
•Sin lucro: La obra espiritualista no busca de ningún modo lucrar por la ayuda prestada ni por ningún otro concepto.
•Sin jerarquías: (Enseñanza 2-32-59: No forméis idolatrías, fanatismo, ni jerarquías materiales. No hay más grandeza que la luz que engalana al espíritu que por su virtud ha alcanzado la perfección). Aunque en los templos generalmente existen diferentes funciones es importante que sea la humildad el sello distintivo de cada cargo. Evitando la vanidad en el corazón.

Enseñanza 3-70-36: Yo os presentare ante la humanidad como mis servidores, como los Espiritualistas Trinitarios Marianos del Tercer Tiempo. Los Espiritualistas, porque seréis más espíritu que materia; los Trinitarios, porque habéis recibido mi manifestación en tres tiempos; Marianos porque amáis a María, vuestra Madre Universal, que es la que ha velado por vosotros para que no desmayéis en la jornada.